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La banda norte de la ría de Arousa y la zona de Iria fueron marginados en el proceso de creación de la Denominación de Origen Rías Baixas pese a su situación geográfica, al mismo tiempo que entraban en ella territorios que nada tienen que ver con esta zona, algunos interesantes desde el punto de vista enológico (Condado, Rosal), otros solo conocidos por su leche, quesos y carne (Val do Ulla). Desde los 90 hubo intentos no coordinados para integrarse en la denominación. Son de destacar los esfuerzos de Anselmo Tarrío, Alberto García y nuestro querido y recordado José Antonio Torrado. Por fin, una década más tarde, nos agrupamos en dos asociaciones: Arousa Norte y Ribeiras Arousa y, con el apoyo de los alcaldes, conseguimos de la Administración que nos reconociese como la Indicación Geográfica Protegida Viños da Terra de Barbanza e Iria, que comprende Catoira, Valga, Padrón, Dodro, Rianxo, Boiro, A Pobra, Ribeira y parte de Porto do Son (hasta Baroña).
El reconocimiento de nuestros vinos es hoy una realidad en desarrollo. Sin embargo, tenemos problemas y los objetivos de la Asociación de Viticultores y Adegueiros de Barbanza e Iria constituyen las soluciones: El incremento de la producción de uva que nos posibilite reducir costes y, como consecuencia, producir un número de botellas suficiente para afrontar los gastos de publicidad y márketing. Para ello hemos constituido una cooperativa, y existen ya trabajos bastante avanzados para crear dos más, una en Rianxo y otra en Boiro. Al mismo tiempo, estamos en contacto con las comunidades de montes para el arrendamiento de superficies grandes para hacer una viticultura rentable.
Otro de nuestros objetivos es la integración en la denominación Rías Baixas, porque nos corresponde por nuestra posición geográfica y por el derecho que tenemos a que nadie se apropie de nuestro nombre y, además, desde el punto de vista enológico, porque la banda norte de la ría tiene la mejor orientación (suroeste) para el cultivo del albariño. Somos un territorio pequeño, pero nuestro terruño produce unos vinos de altísima calidad. El albariño de las tres bodegas homologadas en nuestra indicación geográfica (Anselmo Tarrío, Antonio Saborido y Entre os Ríos) está siendo altamente considerado por catadores de prestigio.
El reconocimiento de nuestros vinos es hoy una realidad en desarrollo. Sin embargo, tenemos problemas y los objetivos de la Asociación de Viticultores y Adegueiros de Barbanza e Iria constituyen las soluciones: El incremento de la producción de uva que nos posibilite reducir costes y, como consecuencia, producir un número de botellas suficiente para afrontar los gastos de publicidad y márketing. Para ello hemos constituido una cooperativa, y existen ya trabajos bastante avanzados para crear dos más, una en Rianxo y otra en Boiro. Al mismo tiempo, estamos en contacto con las comunidades de montes para el arrendamiento de superficies grandes para hacer una viticultura rentable.
Otro de nuestros objetivos es la integración en la denominación Rías Baixas, porque nos corresponde por nuestra posición geográfica y por el derecho que tenemos a que nadie se apropie de nuestro nombre y, además, desde el punto de vista enológico, porque la banda norte de la ría tiene la mejor orientación (suroeste) para el cultivo del albariño. Somos un territorio pequeño, pero nuestro terruño produce unos vinos de altísima calidad. El albariño de las tres bodegas homologadas en nuestra indicación geográfica (Anselmo Tarrío, Antonio Saborido y Entre os Ríos) está siendo altamente considerado por catadores de prestigio.
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