:lvg: | 18/9/2010
Por todo lo alto despidió la Abadía de San Enrique, en el municipio boirense, el verano. El propietario del local hostelero, Core, se rodeó de buenos amigos para organizar una fiesta. Gerardo Ollero y Francisco Hernández se armaron de tenedores y espumaderas para cocinar una suculenta paella, mientras que Xocas se hizo con un cucharón para remover la exquisita queimada. Entre amigos y buena música. Fueron muchas las personas que se pasaron por el bar para degustar ambos manjares. No se perdió la celebración la pandilla de amigos formada por Rosa y Ramón Lueiro , Chicha Astrai , Santiago Vidal , Jesús y Josefa Gato, Pura Mígue y Juan Rodríguez que se desplazaron hasta Boiro desde Santiago. También quisieron disfrutar del festejo Pili Bermúdez, Begoña Vidal, Carlos Triñanes, Rosa María Romero, Carmen Segade, Gil Silva, Arturo y Carmen Romero, y el pequeño Iker. Por cierto, los integrantes de grupo Arume pusieron la nota musical a la velada.
Y mientras en Boiro se celebraba una despedida, en Porto do Son se daba la bienvenida a un nuevo hostelero, Rubén Insua Valiño, que acaba de hacerse cargo de un bar sobradamente conocido, el Ardora, situado en la playa de Fonforrón. El local ha reabierto sus puertas con nuevo nombre, O Chiringo de Fonforrón, y con el propósito de garantizar un ambiente divertido a todas las personas que se acerquen hasta uno de los parajes más hermosos de la costa barbanzana. De día o de noche, merece la pena hacer una parada.
Y mientras en Boiro se celebraba una despedida, en Porto do Son se daba la bienvenida a un nuevo hostelero, Rubén Insua Valiño, que acaba de hacerse cargo de un bar sobradamente conocido, el Ardora, situado en la playa de Fonforrón. El local ha reabierto sus puertas con nuevo nombre, O Chiringo de Fonforrón, y con el propósito de garantizar un ambiente divertido a todas las personas que se acerquen hasta uno de los parajes más hermosos de la costa barbanzana. De día o de noche, merece la pena hacer una parada.
0 comentarios:
Publicar un comentario