:lvg: | 11/06/2010
La polémica está servida. La decisión de abrir la campaña extractiva en las zonas de libre marisqueo de la ría de Muros-Noia no ha gustado nada a las cofradías de Porto do Son y Portosín, y menos a sus representantes. Mostraron su malestar porque el acuerdo no fue adoptado por unanimidad y «non contaron con nós». Tanto el patrón mayor sonense, Tomás Fajardo, como el vicepatrón mayor de Portosín, Gerardo Bazarra, remitieron ayer un escrito a la Consellería do Mar para que no se autorice el inicio de la actividad hasta que no exista un consenso entre los cuatro pósitos.
Los portavoces de ambas entidades marineras señalan en su misiva que el día 3 de mayo recibieron la resolución de la Xunta para la extracción de moluscos a la flota en las zonas de libre marisqueo de la ría y en la que se les recuerda la «obriga de enviar documentación que acredite a designación da confraría de Noia como representante do plan, á que non recoñecemos baixo ningún pretexto».
Tomás Fajardo y Gerardo Bazarra, añaden en su protesta a la Consellería do Mar que recibieron una convocatoria el 1 de junio para «reunirnos o 2, cunha presa que imposibilitaba a nosa asistencia, polo que os acordos foron tomados, como moito, por dúas das catro entidades que se inclúen no plan conxunto».
Los dirigentes entienden que no se reúnen las condiciones mínimas para la apertura de la zona de libre marisqueo, por lo que piden a la Xunta de Galicia que no permita el inicio de la actividad hasta que haya un consenso entre los todos los implicados.
Los portavoces de ambas entidades marineras señalan en su misiva que el día 3 de mayo recibieron la resolución de la Xunta para la extracción de moluscos a la flota en las zonas de libre marisqueo de la ría y en la que se les recuerda la «obriga de enviar documentación que acredite a designación da confraría de Noia como representante do plan, á que non recoñecemos baixo ningún pretexto».
Tomás Fajardo y Gerardo Bazarra, añaden en su protesta a la Consellería do Mar que recibieron una convocatoria el 1 de junio para «reunirnos o 2, cunha presa que imposibilitaba a nosa asistencia, polo que os acordos foron tomados, como moito, por dúas das catro entidades que se inclúen no plan conxunto».
Los dirigentes entienden que no se reúnen las condiciones mínimas para la apertura de la zona de libre marisqueo, por lo que piden a la Xunta de Galicia que no permita el inicio de la actividad hasta que haya un consenso entre los todos los implicados.
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