:lvg: | 13/05/2010
El término sonense fue uno de los grandes beneficiados, el verano pasado, de un plan diseñado por la Xunta para fomentar el empleo. De hecho, llegó a contar con 45 socorristas en sus playas. Este elevado número de profesionales permitió que un municipio con 25 kilómetros de costa pudiera tener vigilantes, por lo menos, en los arenales más concurridos. En esta ocasión, el ejecutivo no aspira a menos y la teniente de alcalde, Ánxela Franco, manifestó que han reclamado ayudas para 45 contratos.
Por su parte, en Boiro vuelven a demostrar que la seguridad en los arenales les preocupa de forma especial y ya han sacado una convocatoria. El responsable del Grumir, Nacho Pérez, manifestó ayer que la intención es tener una bolsa de personal disponible. Si el tiempo acompaña, al igual que ocurrió el verano pasado, el ejecutivo valorará la posibilidad de que el servicio de vigilancia esté operativo desde mediados del mes de junio.
Tanto Boiro como A Pobra y Carnota contratarán al mismo número de socorristas, con independencia de la subvención que reciban, porque consideran que la cantidad que tienen establecida es la mínima para garantizar el servicio.
Piscinas
Por su parte, Lousame pidió dos socorristas para la piscina. En el caso de que no llegue subvención alguna, en los presupuestos municipales se ha reservado una partida para contratar a un profesional, según explicó ayer el alcalde, Santiago Freire.
Por su parte, en Mazaricos optan por encargar la gestión del área de baño municipal a una empresa que, a su vez, es la que se ocupa de que haya el personal necesario para que todo funcione de manera correcta.
Como norma general, los equipos de vigilancia en los arenales están operativos desde el 1 de julio y hasta mediados de septiembre. Sin embargo, la llegada del buen tiempo y el hecho de que la gente se anime a acudir a los arenales cada vez con mayor antelación propicia que sean cada vez más los concellos de la comarca que deciden adelantar la entrada en vigor de la vigilancia para evitar que puedan registrarse fatales accidentes. Habrá que ver si el tiempo propicia tomar esa medida este año.
Por su parte, en Boiro vuelven a demostrar que la seguridad en los arenales les preocupa de forma especial y ya han sacado una convocatoria. El responsable del Grumir, Nacho Pérez, manifestó ayer que la intención es tener una bolsa de personal disponible. Si el tiempo acompaña, al igual que ocurrió el verano pasado, el ejecutivo valorará la posibilidad de que el servicio de vigilancia esté operativo desde mediados del mes de junio.
Tanto Boiro como A Pobra y Carnota contratarán al mismo número de socorristas, con independencia de la subvención que reciban, porque consideran que la cantidad que tienen establecida es la mínima para garantizar el servicio.
Piscinas
Por su parte, Lousame pidió dos socorristas para la piscina. En el caso de que no llegue subvención alguna, en los presupuestos municipales se ha reservado una partida para contratar a un profesional, según explicó ayer el alcalde, Santiago Freire.
Por su parte, en Mazaricos optan por encargar la gestión del área de baño municipal a una empresa que, a su vez, es la que se ocupa de que haya el personal necesario para que todo funcione de manera correcta.
Como norma general, los equipos de vigilancia en los arenales están operativos desde el 1 de julio y hasta mediados de septiembre. Sin embargo, la llegada del buen tiempo y el hecho de que la gente se anime a acudir a los arenales cada vez con mayor antelación propicia que sean cada vez más los concellos de la comarca que deciden adelantar la entrada en vigor de la vigilancia para evitar que puedan registrarse fatales accidentes. Habrá que ver si el tiempo propicia tomar esa medida este año.
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