:lvg: | 20/11/2010
La firma Fomento y la mancomunidad se reunirán la próxima semana
Una vez desconvocada la huelga por parte de los trabajadores de Servia en los concellos de Carnota y Ames, todas las miradas se vuelven ahora hacia las negociaciones que mantienen desde hace meses la Mancomunidade Serra do Barbanza y la firma adjudicataria de la planta de Servia, Fomento de Construcciones y Contratas (FCC). En este momento, y después de que la mancomunidad notificase a todos los alcaldes el estado en el que se encuentran las conversaciones, se ha hecho público que los contactos se han estancado en algunos puntos concretos, en donde las pretensiones de FCC se disparan hasta rondar los dos millones de euros.
Por una parte, FCC solicita en la revisión de precios correspondiente a los años 2007-2008 una subida que supera los 900.000 euros, algo que desde la propia mancomunidad ya aseguraron que no aceptarán al considerarla abusiva. A mayores, la firma Fomento solicita unas liquidaciones por modificación de servicios que fija en 480.000 euros. Este apartado, hace referencia concreta a la ampliación de puntos de recogida, tanto en los concellos que pertenecen por pleno derecho a Serra do Barbanza como los que se han adherido.
Sobre esta cuestión concreta, fuentes de la entidad supramunicipal confirmaron que «FCC se aprovecha de las posibles interpretaciones que existen en el contrato, facturando una cantidad que resulta abusiva».
Intereses de demora
Otra de las pretensiones que desde la entidad que preside Domingos Dosil no están dispuestos a sumir es el pago de los intereses generados por la deuda que esta entidad tiene con FCC. La empresa solicita 500.000 euros, algo que sin duda ha ayudado a generar la situación de estancamiento en la que se encuentran las negociaciones entre ambas partes.
Desde la mancomunidad, que ofrece un servicio de recogida de basura a una población de 85.000 habitantes repartidos en nueve concellos, aseguran que resulta difícil asumir estas pretensiones, «ya que además hay comprometidos dos pagos de 520.000 euros antes de que finalice el año para seguir reduciendo la deuda acumulada».
Llegados a este punto, desde Serra do Barbanza están buscando un día de la próxima semana para mantener un encuentro con representantes de FCC para intentar recuperar el diálogo. A esta reunión están llamados los seis alcaldes de los concellos que pertenecen por pleno derecho a la mancomunidad. Una situación que cambia al ser comparada con los anteriores contactos, en donde eran el presidente y alcalde de Muros, Domingo Dosil, y el gerente, los encargados de llevarlas personalmente.
Una vez desconvocada la huelga por parte de los trabajadores de Servia en los concellos de Carnota y Ames, todas las miradas se vuelven ahora hacia las negociaciones que mantienen desde hace meses la Mancomunidade Serra do Barbanza y la firma adjudicataria de la planta de Servia, Fomento de Construcciones y Contratas (FCC). En este momento, y después de que la mancomunidad notificase a todos los alcaldes el estado en el que se encuentran las conversaciones, se ha hecho público que los contactos se han estancado en algunos puntos concretos, en donde las pretensiones de FCC se disparan hasta rondar los dos millones de euros.
Por una parte, FCC solicita en la revisión de precios correspondiente a los años 2007-2008 una subida que supera los 900.000 euros, algo que desde la propia mancomunidad ya aseguraron que no aceptarán al considerarla abusiva. A mayores, la firma Fomento solicita unas liquidaciones por modificación de servicios que fija en 480.000 euros. Este apartado, hace referencia concreta a la ampliación de puntos de recogida, tanto en los concellos que pertenecen por pleno derecho a Serra do Barbanza como los que se han adherido.
Sobre esta cuestión concreta, fuentes de la entidad supramunicipal confirmaron que «FCC se aprovecha de las posibles interpretaciones que existen en el contrato, facturando una cantidad que resulta abusiva».
Intereses de demora
Otra de las pretensiones que desde la entidad que preside Domingos Dosil no están dispuestos a sumir es el pago de los intereses generados por la deuda que esta entidad tiene con FCC. La empresa solicita 500.000 euros, algo que sin duda ha ayudado a generar la situación de estancamiento en la que se encuentran las negociaciones entre ambas partes.
Desde la mancomunidad, que ofrece un servicio de recogida de basura a una población de 85.000 habitantes repartidos en nueve concellos, aseguran que resulta difícil asumir estas pretensiones, «ya que además hay comprometidos dos pagos de 520.000 euros antes de que finalice el año para seguir reduciendo la deuda acumulada».
Llegados a este punto, desde Serra do Barbanza están buscando un día de la próxima semana para mantener un encuentro con representantes de FCC para intentar recuperar el diálogo. A esta reunión están llamados los seis alcaldes de los concellos que pertenecen por pleno derecho a la mancomunidad. Una situación que cambia al ser comparada con los anteriores contactos, en donde eran el presidente y alcalde de Muros, Domingo Dosil, y el gerente, los encargados de llevarlas personalmente.
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