:ecg: | 17/11/2010
La mancomunidad ratifica que la huelga es injustificada e ilegal. Los concellos amenazan con intervenir y pasarle la factura
Los trabajadores de Servia, la ecoplanta de tratamiento de basuras de Lousame, encontraron un nuevo oponente en su enfrentamiento con los municipios que no aprueban su exigencia de compromiso con el servicio que da la instalación.
Tras la guerra abierta con los alcaldes de Ames y Carnota, municipios en los que mantienen una huelga de recogida de residuos desde el pasado viernes, ahora es la propia Mancomunidade Serra do Barbanza, impulsora y responsable de la planta, la que se planta firme contra el paro laboral.
En calidad de presidente de la entidad supramunicipal, Domingos Dosil remitía ayer sendos escritos a FCC, concesionaria del servicio en huelga, y a la Dirección Xeral de Relacións Laborais de la Xunta de Galicia, en el que mostraba el apoyo de la mancomunidad a Ames y Carnota, en sus reivindicaciones sobre la improcedencia de la huelga.
En el texto se hace constar que "a folga é ilegal e inxustificada, posto que incumple os requisitos de preaviso e motivación", dado que los trabajadores no reclaman derechos laborales a sus superiores, sino que pretenden forzar a los ayuntamientos a mantener su relación contractual con Servia, de modo indefinido, con el argumento de garantizar así los puestos de trabajo de sus empleados.
Finalmente, el escrito requiere a FCC que "de inmediato adopte as medidas precisas para reanudar a prestación do servizo de recollida de lixoo" en las localidades de Ames y Carnota.
Por su parte, los alcaldes afectados se mantienen firmes en sus posicionamientos. Para el regidor carnotano, José Oreiro, la huelga es "atípica, selectiva y política" ya que no existen a su parecer razones de carácter laboral para ir a la huelga, una tesis que ratifica su homólogo amiense, Carlos Fernández.
Ambos coinciden también en su plan de futuro: adoptarán las medidas "que en derecho nos asistan para defendernos de esta injusticia". Estas pasarán, de persistir el paro, en caso de que el comité de empresa no recule en su convocatoria, por ejecutar a través de medios propios los servicios de recogida y pasar, posteriormente, la factura a Serra do Barbanza, que es la entidad con la que mantienen la relación contractual para la prestación del servicio.
27 toneladas al día. Mientras ayer se producían nuevos posicionamientos en torno a la huelga, ésta dejaba claras evidencias en las calles de Ames y Carnota, donde se estima que el volumen de basura asciende a 27 toneladas diarias.
En Ames, los servicios mínimos de Servia recogían el lunes por la noche parte de los residuos acumulados, pero obviaron muchas calles de Bertamirás, O Milladoiro y Aldea Nova. En Carnota, los contenedores empezaron también a desbordar. Ambos alcaldes decretarán en las próximas horas la recogida alternativa si no se desconvoca la huelga.
Los trabajadores de Servia, la ecoplanta de tratamiento de basuras de Lousame, encontraron un nuevo oponente en su enfrentamiento con los municipios que no aprueban su exigencia de compromiso con el servicio que da la instalación.
Tras la guerra abierta con los alcaldes de Ames y Carnota, municipios en los que mantienen una huelga de recogida de residuos desde el pasado viernes, ahora es la propia Mancomunidade Serra do Barbanza, impulsora y responsable de la planta, la que se planta firme contra el paro laboral.
En calidad de presidente de la entidad supramunicipal, Domingos Dosil remitía ayer sendos escritos a FCC, concesionaria del servicio en huelga, y a la Dirección Xeral de Relacións Laborais de la Xunta de Galicia, en el que mostraba el apoyo de la mancomunidad a Ames y Carnota, en sus reivindicaciones sobre la improcedencia de la huelga.
En el texto se hace constar que "a folga é ilegal e inxustificada, posto que incumple os requisitos de preaviso e motivación", dado que los trabajadores no reclaman derechos laborales a sus superiores, sino que pretenden forzar a los ayuntamientos a mantener su relación contractual con Servia, de modo indefinido, con el argumento de garantizar así los puestos de trabajo de sus empleados.
Finalmente, el escrito requiere a FCC que "de inmediato adopte as medidas precisas para reanudar a prestación do servizo de recollida de lixoo" en las localidades de Ames y Carnota.
Por su parte, los alcaldes afectados se mantienen firmes en sus posicionamientos. Para el regidor carnotano, José Oreiro, la huelga es "atípica, selectiva y política" ya que no existen a su parecer razones de carácter laboral para ir a la huelga, una tesis que ratifica su homólogo amiense, Carlos Fernández.
Ambos coinciden también en su plan de futuro: adoptarán las medidas "que en derecho nos asistan para defendernos de esta injusticia". Estas pasarán, de persistir el paro, en caso de que el comité de empresa no recule en su convocatoria, por ejecutar a través de medios propios los servicios de recogida y pasar, posteriormente, la factura a Serra do Barbanza, que es la entidad con la que mantienen la relación contractual para la prestación del servicio.
27 toneladas al día. Mientras ayer se producían nuevos posicionamientos en torno a la huelga, ésta dejaba claras evidencias en las calles de Ames y Carnota, donde se estima que el volumen de basura asciende a 27 toneladas diarias.
En Ames, los servicios mínimos de Servia recogían el lunes por la noche parte de los residuos acumulados, pero obviaron muchas calles de Bertamirás, O Milladoiro y Aldea Nova. En Carnota, los contenedores empezaron también a desbordar. Ambos alcaldes decretarán en las próximas horas la recogida alternativa si no se desconvoca la huelga.
Hasta que no consigan echar al garete este sistema ecológico de tratamiento de la basura, nuestros políticos no pararan. Si todos los ayuntamientos nos cobran religiosamente la factura por prestarnos el servicio FCC, ¿por qué después le dan tantas vueltas para pagarle?
0 comentarios:
Publicar un comentario