:lvg: | 18/11/2010
Los dueños, que estaban en la vivienda, fueron avisados minutos antes del suceso
Sucedió a primera hora de la tarde del martes. Las obras del futuro museo del mar de Porto do Son causaron que parte del muro de una de las viviendas contiguas se derrumbara. Minutos antes de que esto ocurriera, uno de los operarios que se encontraba trabajando en la obra avisó al matrimonio propietario de este inmueble unifamiliar, que desalojó la casa para comprobar como parte de la pared que coincide con su dormitorio se venía abajo.
Fue durante la tarde del mismo martes cuando los obreros de la empresa que se encarga de la construcción del futuro museo colocaron, tanto en la cocina, que se encuentra en la primera planta, como en el dormitorio, que está en el segundo piso, puntales para reforzar el techo en estas dos estancias. A mayores, en la parte exterior, todavía ayer era visible el trabajo necesario para apuntalar la pared con el objetivo de evitar daños mayores.
El martes podrán regresar
Francisco Avilés, dueño de la vivienda, aseguraba que hacía tiempo que habló con un concejal del ejecutivo local para transmitirle su preocupación por las consecuencias de esta obra, ya que, tal y como reconoce: «A casa ten moitos anos e os materiais son antigos». Aún así, Avilés quiso manifestar que tanto el regidor como la teniente de alcalde de Porto do Son les transmitieron todo su apoyo, siendo el Concello la institución que correrá con todos los gastos de alojamiento y manutención que esta situación pueda producir. Fue el mismo regidor, Pastor Rodríguez, quien confirmó ayer tarde que «os propietarios poderán regresar á súa casa o vindeiro martes, que é cando calculamos que a reparación esté rematada».
Mientras, el portavoz popular, Manuel Tomé, aprovechó el incidente para criticar la seguridad de la obra.
Sucedió a primera hora de la tarde del martes. Las obras del futuro museo del mar de Porto do Son causaron que parte del muro de una de las viviendas contiguas se derrumbara. Minutos antes de que esto ocurriera, uno de los operarios que se encontraba trabajando en la obra avisó al matrimonio propietario de este inmueble unifamiliar, que desalojó la casa para comprobar como parte de la pared que coincide con su dormitorio se venía abajo.
Fue durante la tarde del mismo martes cuando los obreros de la empresa que se encarga de la construcción del futuro museo colocaron, tanto en la cocina, que se encuentra en la primera planta, como en el dormitorio, que está en el segundo piso, puntales para reforzar el techo en estas dos estancias. A mayores, en la parte exterior, todavía ayer era visible el trabajo necesario para apuntalar la pared con el objetivo de evitar daños mayores.
El martes podrán regresar
Francisco Avilés, dueño de la vivienda, aseguraba que hacía tiempo que habló con un concejal del ejecutivo local para transmitirle su preocupación por las consecuencias de esta obra, ya que, tal y como reconoce: «A casa ten moitos anos e os materiais son antigos». Aún así, Avilés quiso manifestar que tanto el regidor como la teniente de alcalde de Porto do Son les transmitieron todo su apoyo, siendo el Concello la institución que correrá con todos los gastos de alojamiento y manutención que esta situación pueda producir. Fue el mismo regidor, Pastor Rodríguez, quien confirmó ayer tarde que «os propietarios poderán regresar á súa casa o vindeiro martes, que é cando calculamos que a reparación esté rematada».
Mientras, el portavoz popular, Manuel Tomé, aprovechó el incidente para criticar la seguridad de la obra.
Si las cosas se hicieran bien, el portavoz popular no "aprovecharía" el incidente para criticar una verdadera chapuza que pudo causar desgracias personales.
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