:ecg: | 18/03/2010
La verja que sirve de protección sobre el río de la Iglesia, en Portosín, está rota. La reja de hierro no sólo resulta peligrosa para los niños y personas mayores que se apoyen en ella, sino también para los viandantes que a diario pasan por esa zona. Las brigadas municipales de O Son deberían adecentarla y arreglarla ya.
Si mi memoria no me hace una mala jugada, es la segunda vez que esta baranda que lleva varios años así, aparece en esta sección.
Lastima que el fotógrafo decidiese no hacer la toma desde otra posición, para que se viese como se encajó el río entre los edificios (a la derecha pueden ver la base de uno) y más adelante se "entubó", para poder construir sobre su cauce.
Así funcionó la permisividad de nuestros políticos para destruir este emblemático pueblo. Ahora veremos quien se hace cargo, cuando el río reclame lo que es suyo.
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