:lvg: | 7/10/2010
«O Cupo de xurelo para este ano xa está esgotado». Así se pronunciaba el patrón mayor de Portosín, Eduardo Carreño, sobre una de las principales especies de la flota del cerco. Hace unos días, el dirigente de la entidad marinera mantuvo una reunión con los armadores de la localidad para analizar la situación del sector y en la que anunció que el tope admisible de capturas (TAC) de esta especie ya se agotó, por lo que en cualquier momento les puede llegar la orden para que dejen de cogerlo. Al respecto, los empresarios acordaron dirigirse a la Administración para que las cuotas se repartan para el año por flotas.
La situación no pinta nada bien, según comentó el responsable del pósito de Portosín. Y es que el chincho es una especie principal del colectivo del cerco pero este año «collemos moi pouco». Sin embargo, los topes ya están agotados para el presente año y en cualquier momento, «Madrid pode enviar unha circular prohibindo que se colla», según Carreño.
Propuesta
Los armadores están bastante molestos pues no entienden que se agotara el tope en la zona comprendida entre Touriñán y el golfo de Vizcaya cuando ellos apenas han vendido esta especie.
El problema es, según Carreño, que el colectivo del arrastre pescó grandes cantidades en el presente año y ahora «xa non queda nada».
Los empresarios acordaron remitir una propuesta a las autoridades competentes para el año próximo con la finalidad de que «cada flota teña unha cantidade fixa e non coma agora, que se reparte entre todos os barcos». Así, lo que pretenden en Portosín es que la Administración conceda un tope para el cerco, otro para el arrastre y otro para el colectivo de artes varias con la finalidad de que «outros no collan o que nos pertence».
La situación no pinta nada bien, según comentó el responsable del pósito de Portosín. Y es que el chincho es una especie principal del colectivo del cerco pero este año «collemos moi pouco». Sin embargo, los topes ya están agotados para el presente año y en cualquier momento, «Madrid pode enviar unha circular prohibindo que se colla», según Carreño.
Propuesta
Los armadores están bastante molestos pues no entienden que se agotara el tope en la zona comprendida entre Touriñán y el golfo de Vizcaya cuando ellos apenas han vendido esta especie.
El problema es, según Carreño, que el colectivo del arrastre pescó grandes cantidades en el presente año y ahora «xa non queda nada».
Los empresarios acordaron remitir una propuesta a las autoridades competentes para el año próximo con la finalidad de que «cada flota teña unha cantidade fixa e non coma agora, que se reparte entre todos os barcos». Así, lo que pretenden en Portosín es que la Administración conceda un tope para el cerco, otro para el arrastre y otro para el colectivo de artes varias con la finalidad de que «outros no collan o que nos pertence».
Poca memoría tienen algunos colectivos.
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