:lvg: | 31/10/2010
El de la variante de outes está previsto que se abra al tráfico en el mes de noviembre
Las localidades del entorno de la ría de Muros y Noia tendrán una mejor conexión, más directa, con la capital de Galicia gracias a las variantes de la villa noiesa y Outes, que incluyen sendos puentes. Estas actuaciones permitirán un ahorro entre Porto do Son y Muros de 10 kilómetros y una reducción de 4 kilómetros entre la primera localidad y Santiago. Además, las comunicaciones entre Noia y Compostela se reducirán hasta los 22 minutos una vez entre en servicio el último tramo del corredor a Brión.
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas adjudicó el pasado mes de mayo las obras de construcción de la variante de Noia por un importe de 32,9 millones de euros y éstas comenzaron a mediados de agosto. La constructora dispondrá de tres años para finalizar los trabajos, por lo que se prevé su apertura al tráfico en 2013.
Tal como detalló el departamento que dirige Agustín Hernández en un comunicado, la empresa adjudicataria es Puentes y Calzadas y la obra tiene como objetivo final unir las dos márgenes de la ría, sacar los tráficos de tránsito del casco urbano noiés y mejorar las comunicaciones con la capital gallega. Una vez finalizada la actuación, la variante desviará más de un millón de vehículos al año, que ya no tendrán que pasar por el centro de la villa, y beneficiará a más de 40.000 habitantes de Noia, Muros, Outes y Porto do Son. Según los estudios de la Xunta, la variante canalizará unos 3.000 vehículos diarios que escogerán esta vía para realizar sus desplazamientos.
El nuevo vial tendrá una longitud de cinco kilómetros y un ancho superior a los diez metros, en el que se incluirán aceras para facilitar la seguridad de los peatones. Además, contempla un puente sobre la ría de 1.470 metros de longitud, que incluirá un paseo peatonal de dos metros y medio de ancho, y contará con rampas de acceso en Testal y A Barquiña. La variante partirá del núcleo de Taramancos, en donde se separará de la AC-550 y se dará prioridad a la nueva vía. Una vez superado el enlace, el trazado discurre al norte del núcleo y presenta un paso superior sobre la variante para restituir un camino de conexión entre la costa y Tarmancos y contará con un semienlace en Punta Rebordiño, que dará acceso a Testal.
El recorrido del proyecto también evitará, mediante un viaducto, la zona del aparcamiento del centro comercial existente en A Barquiña. Además, en el final del trazado, en la zona de Ceilán, se construirá un enlace tipo glorieta bajo la carretera que servirá de conexión con la AC-550 y el futuro corredor Noia-Martelo.
VARIANTE DE OUTES. Por otra parte, la variante de Outes estará lista para abrir al tráfico a finales del próximo mes de noviembre, según comunicaron fuentes municipales. Las obras se encuentran muy avanzadas y actualmente se están acondicionando los enlaces de entrada y salida a la nueva vía. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras ya anunció el pasado mes de agosto que la actuación estaría acabada antes de que finalizara el año. Este proyecto, que cuenta con una inversión de 18 millones de euros, tiene asignados 4,7 millones para este año, y su puesta en funcionamiento evitará que el tráfico de largo recorrido en dirección Muros y Noia atraviese el casco urbano de Serra de Outes.
La nueva carretera, que enlaza los núcleos de Ceilán con el de Catasueiro, en O Freixo, tiene una longitud de 4,7 kilómetros y discurre en parte sobre dos viaductos: uno de ellos, de 800 metros de largo, está situado por encima de la desembocadura del río Tines, a la altura de la ensenada de O Engano, y el otro, de casi 100 metros de longitud, se ubica sobre el río Bendimón.
La empresa constructora se encuentra actualmente acondicionando los enlaces de entrada y salida y destaca la conexión a la playa de Broña, uno de los principales atractivos turísticos del municipio de Outes, donde se habilitará una rotonda tanto para acceder al nuevo vial como al arenal. Por ello, durante estos días los accesos a ese núcleo se encuentran cerrados y es necesario tomar accesos alternativos.
Tal como detalló la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, la nueva variante, que une los límites de los concellos de Noia y Muros, permitirá que los usuarios de más de 9.000 vehículos que circulan a diario por este tramo y los 8.500 vecinos de Outes se liberen de la presión de tráfico que soporta el casco urbano de A Serra (la capital municipal outiense). Además, según apuntan las mismas fuentes del Gobierno gallego, incidirá en la mejora de la movilidad de los más de 33.500 habitantes de los municipios de Outes, Noia y Muros.
Las localidades del entorno de la ría de Muros y Noia tendrán una mejor conexión, más directa, con la capital de Galicia gracias a las variantes de la villa noiesa y Outes, que incluyen sendos puentes. Estas actuaciones permitirán un ahorro entre Porto do Son y Muros de 10 kilómetros y una reducción de 4 kilómetros entre la primera localidad y Santiago. Además, las comunicaciones entre Noia y Compostela se reducirán hasta los 22 minutos una vez entre en servicio el último tramo del corredor a Brión.
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas adjudicó el pasado mes de mayo las obras de construcción de la variante de Noia por un importe de 32,9 millones de euros y éstas comenzaron a mediados de agosto. La constructora dispondrá de tres años para finalizar los trabajos, por lo que se prevé su apertura al tráfico en 2013.
Tal como detalló el departamento que dirige Agustín Hernández en un comunicado, la empresa adjudicataria es Puentes y Calzadas y la obra tiene como objetivo final unir las dos márgenes de la ría, sacar los tráficos de tránsito del casco urbano noiés y mejorar las comunicaciones con la capital gallega. Una vez finalizada la actuación, la variante desviará más de un millón de vehículos al año, que ya no tendrán que pasar por el centro de la villa, y beneficiará a más de 40.000 habitantes de Noia, Muros, Outes y Porto do Son. Según los estudios de la Xunta, la variante canalizará unos 3.000 vehículos diarios que escogerán esta vía para realizar sus desplazamientos.
El nuevo vial tendrá una longitud de cinco kilómetros y un ancho superior a los diez metros, en el que se incluirán aceras para facilitar la seguridad de los peatones. Además, contempla un puente sobre la ría de 1.470 metros de longitud, que incluirá un paseo peatonal de dos metros y medio de ancho, y contará con rampas de acceso en Testal y A Barquiña. La variante partirá del núcleo de Taramancos, en donde se separará de la AC-550 y se dará prioridad a la nueva vía. Una vez superado el enlace, el trazado discurre al norte del núcleo y presenta un paso superior sobre la variante para restituir un camino de conexión entre la costa y Tarmancos y contará con un semienlace en Punta Rebordiño, que dará acceso a Testal.
El recorrido del proyecto también evitará, mediante un viaducto, la zona del aparcamiento del centro comercial existente en A Barquiña. Además, en el final del trazado, en la zona de Ceilán, se construirá un enlace tipo glorieta bajo la carretera que servirá de conexión con la AC-550 y el futuro corredor Noia-Martelo.
VARIANTE DE OUTES. Por otra parte, la variante de Outes estará lista para abrir al tráfico a finales del próximo mes de noviembre, según comunicaron fuentes municipales. Las obras se encuentran muy avanzadas y actualmente se están acondicionando los enlaces de entrada y salida a la nueva vía. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras ya anunció el pasado mes de agosto que la actuación estaría acabada antes de que finalizara el año. Este proyecto, que cuenta con una inversión de 18 millones de euros, tiene asignados 4,7 millones para este año, y su puesta en funcionamiento evitará que el tráfico de largo recorrido en dirección Muros y Noia atraviese el casco urbano de Serra de Outes.
La nueva carretera, que enlaza los núcleos de Ceilán con el de Catasueiro, en O Freixo, tiene una longitud de 4,7 kilómetros y discurre en parte sobre dos viaductos: uno de ellos, de 800 metros de largo, está situado por encima de la desembocadura del río Tines, a la altura de la ensenada de O Engano, y el otro, de casi 100 metros de longitud, se ubica sobre el río Bendimón.
La empresa constructora se encuentra actualmente acondicionando los enlaces de entrada y salida y destaca la conexión a la playa de Broña, uno de los principales atractivos turísticos del municipio de Outes, donde se habilitará una rotonda tanto para acceder al nuevo vial como al arenal. Por ello, durante estos días los accesos a ese núcleo se encuentran cerrados y es necesario tomar accesos alternativos.
Tal como detalló la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, la nueva variante, que une los límites de los concellos de Noia y Muros, permitirá que los usuarios de más de 9.000 vehículos que circulan a diario por este tramo y los 8.500 vecinos de Outes se liberen de la presión de tráfico que soporta el casco urbano de A Serra (la capital municipal outiense). Además, según apuntan las mismas fuentes del Gobierno gallego, incidirá en la mejora de la movilidad de los más de 33.500 habitantes de los municipios de Outes, Noia y Muros.
0 comentarios:
Publicar un comentario