:logo-lvg: | Barbanza
Vicente Colomer recibió la insignia de oro del Concello
En un acto lleno de emoción, espectáculo, reencuentros y recuerdos, el grupo de baile sonense Anduriña conmemoró sus veinticinco años de trayectoria. Fue una cita que quedará en la memoria de sus componentes y de aquellos que pudieron disfrutar de la exhibición, no solo por el gran talento y despliegue artístico de estos bailarines, sino también por la carga emotiva que acompañaba cada paso del grupo.
La plaza de España de Porto do Son acogió la noche del domingo a una gran multitud deseosa de empaparse del arte del entusiasmado colectivo. Pese a que llevaban todo el año ensayando, el último mes exigió un sobreesfuerzo para los bailarines, que querían conmemorar su aniversario dando lo mejor de sí. Este espectáculo no solo sirvió como entretenimiento para los presentes sino que los acercó al grupo y les permitió conocer en profundidad a un colectivo que lleva vivo en su localidad un cuarto de siglo.
El acto giró en torno a la trayectoria del grupo de baile, compartiendo los cambios y los avances que este conjunto ha ido experimentando a lo largo de los años. Un vídeo, obra de José Bouzas, marcó el inicio de una noche que se presentaba, cuanto menos, emotiva. Con un contenido audiovisual completo por el recorrido del grupo de baile se dio el pistoletazo de salida a una puesta en escena extraordinaria.
El espectáculo continuó con catorce bailes en los que, tanto mayores como pequeños, deleitaron al público con su soltura y destreza sobre el escenario. Desde coreografías con un carácter más clásico, similar a los primeros años de la agrupación, a un estilo más actual, el despliegue de técnica y talento dejó impresionados a los presentes, que permanecieron atentos durante la hora y media que duró esta exhibición.
Gran familia
Este colectivo se ha convertido en una gran familia, por ello, para celebrar su aniversario, antiguos componentes del grupo de baile se unieron en el escenario a los actuales. «Los componentes se sintieron protagonistas en el aniversario de un grupo que sigue vivo gracias a ellos», explicaba Vicente Colomer, director de la agrupación. El mismo Colomer quiso ser partícipe directo y compartir este momento con sus alumnos con una exhibición de baile con zuecos y percusión junto con dos de los integrantes del grupo.
Al finalizar la actuación, Luis Oujo, alcalde de Porto do Son, junto con la antigua concejala de Cultura y primera persona en depositar su confianza en esta formación, Pepita Mariño, y la edila Asunción Torres, hicieron entrega de la insignia de oro del Concello a Vicente Colomer, un reconocimiento que se hizo extensivo a todo el grupo. Con esta distinción, se quiso premiar la larga trayectoria de un director y una formación que se ha convertido en todo un referente y por la que han pasado varias generaciones de sonenses.
En un acto lleno de emoción, espectáculo, reencuentros y recuerdos, el grupo de baile sonense Anduriña conmemoró sus veinticinco años de trayectoria. Fue una cita que quedará en la memoria de sus componentes y de aquellos que pudieron disfrutar de la exhibición, no solo por el gran talento y despliegue artístico de estos bailarines, sino también por la carga emotiva que acompañaba cada paso del grupo.
La plaza de España de Porto do Son acogió la noche del domingo a una gran multitud deseosa de empaparse del arte del entusiasmado colectivo. Pese a que llevaban todo el año ensayando, el último mes exigió un sobreesfuerzo para los bailarines, que querían conmemorar su aniversario dando lo mejor de sí. Este espectáculo no solo sirvió como entretenimiento para los presentes sino que los acercó al grupo y les permitió conocer en profundidad a un colectivo que lleva vivo en su localidad un cuarto de siglo.
El acto giró en torno a la trayectoria del grupo de baile, compartiendo los cambios y los avances que este conjunto ha ido experimentando a lo largo de los años. Un vídeo, obra de José Bouzas, marcó el inicio de una noche que se presentaba, cuanto menos, emotiva. Con un contenido audiovisual completo por el recorrido del grupo de baile se dio el pistoletazo de salida a una puesta en escena extraordinaria.
El espectáculo continuó con catorce bailes en los que, tanto mayores como pequeños, deleitaron al público con su soltura y destreza sobre el escenario. Desde coreografías con un carácter más clásico, similar a los primeros años de la agrupación, a un estilo más actual, el despliegue de técnica y talento dejó impresionados a los presentes, que permanecieron atentos durante la hora y media que duró esta exhibición.
Gran familia
Este colectivo se ha convertido en una gran familia, por ello, para celebrar su aniversario, antiguos componentes del grupo de baile se unieron en el escenario a los actuales. «Los componentes se sintieron protagonistas en el aniversario de un grupo que sigue vivo gracias a ellos», explicaba Vicente Colomer, director de la agrupación. El mismo Colomer quiso ser partícipe directo y compartir este momento con sus alumnos con una exhibición de baile con zuecos y percusión junto con dos de los integrantes del grupo.
Al finalizar la actuación, Luis Oujo, alcalde de Porto do Son, junto con la antigua concejala de Cultura y primera persona en depositar su confianza en esta formación, Pepita Mariño, y la edila Asunción Torres, hicieron entrega de la insignia de oro del Concello a Vicente Colomer, un reconocimiento que se hizo extensivo a todo el grupo. Con esta distinción, se quiso premiar la larga trayectoria de un director y una formación que se ha convertido en todo un referente y por la que han pasado varias generaciones de sonenses.
0 comentarios:
Publicar un comentario