:lvg: | 5/4/2011
Durante la jornada de ayer se registraron tres incendios, en los municipios de Ribeira, Porto do Son y Noia, a causa de quemas que, al parecer, se descontrolaron.
El suceso más importante se produjo la parroquia ribeirense de Oleiros. Los equipos de emergencias desplazados al lugar, entre los que se encontraban el Grumir, bomberos de Ribeira, Policía Nacional y Local, tardaron unas dos horas en sofocar las llamas.
Al parecer, en el terreno había ramas de unos eucaliptos que fueron cortados hace unos días y eso provocó que el fuego se dispersase.
Por lo que respecta a Noia, el incendio se originó en una parcela situada en la parroquia de Santa María do Castro. Las llamas se propagaron a unas fincas colindantes. Al lugar acudieron integrantes del Grumir noiés, así como una cuadrilla del distrito forestal.
Área arbolada
Posteriormente también hubo otro suceso similar, en este caso en Portosín y, al parecer, también a consecuencia de una quema que se descontroló. En este último caso el percance tuvo lugar en una zona arbolada, lo que incrementaba el peligro de que las llamas pudieran propagarse.
Finalmente, la intervención del Grumir noiés y de cuadrillas de extinción de la Xunta permitió apagar las llamas.
El suceso más importante se produjo la parroquia ribeirense de Oleiros. Los equipos de emergencias desplazados al lugar, entre los que se encontraban el Grumir, bomberos de Ribeira, Policía Nacional y Local, tardaron unas dos horas en sofocar las llamas.
Al parecer, en el terreno había ramas de unos eucaliptos que fueron cortados hace unos días y eso provocó que el fuego se dispersase.
Por lo que respecta a Noia, el incendio se originó en una parcela situada en la parroquia de Santa María do Castro. Las llamas se propagaron a unas fincas colindantes. Al lugar acudieron integrantes del Grumir noiés, así como una cuadrilla del distrito forestal.
Área arbolada
Posteriormente también hubo otro suceso similar, en este caso en Portosín y, al parecer, también a consecuencia de una quema que se descontroló. En este último caso el percance tuvo lugar en una zona arbolada, lo que incrementaba el peligro de que las llamas pudieran propagarse.
Finalmente, la intervención del Grumir noiés y de cuadrillas de extinción de la Xunta permitió apagar las llamas.
Ya son demasiados los conatos de incendios que se producen por culpa de quemas de rastrojos y a lo mejor los permisos solo se deberían preferentemente en invierno y fuera de esa época, solo autorizarlas en caso de lluvia.
0 comentarios:
Publicar un comentario