:lvg: | 5/11/2010
Las industrias mantienen su fortaleza, con los niveles de paro más bajos desde que comenzó el año.
El número de demandantes vuelve a superar las 1.800 personas, algo que no sucedía desde julio.
Después de seis meses consecutivos de bajadas, la buena racha por la que atravesaba el sector de la construcción en lo que respecta a la contratación se ha roto y el informe oficial del paro, dado a conocer el miércoles, refleja que el desempleo en esta rama ha pasado de la tendencia descendente a la ascendente. Eso sí, por el momento las cifras de demandantes están lejos de las que se contabilizaban a principios de año, cuando había más de dos mil personas inscritas en los registros autonómicos. En la actualidad, el número es de 1.833 ciudadanos, lo que representa 48 más que los del mes de septiembre.
Cabe señalar que es Boiro el municipio barbanzano con mayor cantidad de demandantes en esta rama de actividad, con 370 anotados, lo que significa 132 más que el ayuntamiento situado en segundo lugar, Rianxo.
Un profesional del ramo que prefiere no dar su nombre, y que desde el 2006 trabaja como autónomo, señala que la competencia desleal es uno de los principales problemas a los que se enfrentan las personas que, como él, trabajan por su cuenta. Este hombre comentó que ha entregado presupuestos a particulares que luego le han dicho que no le contrataban el trabajo «porque outros facían o choio a 30 ou 35 euros a hora. Unha persoa que abona a paga de autónomos non pode traballar por ese prezo».
Oscilación de los servicios
Tampoco marchan bien las cosas en el sector servicios. La incidencia de la temporalidad es patente a poco que se examinen, mes a mes, los datos que publica la Consellería de Traballo. En enero, febrero y marzo, la cifra de ciudadanos en busca de ocupación en esta rama de actividad superaba los 4.400. Al llegar abril, la cuantía bajó a 4.300 y en agosto rondaban los 3.700. Con la conclusión del verano, la tendencia a la baja se ha invertido y ahora ya vuelve a situarse en la franja de los 4.000 el número de demandantes. Desde varios colectivos se apunta que, posiblemente, los datos correspondientes a noviembre sean todavía peores que los de octubre.
En el polo opuesto se sitúa la industria, que parece estar inmunizada contra lo que está cayendo. El índice de desocupados ha vuelto a descender en este sector económico y son 1.249 los demandantes. Esta cifra es la segunda más baja del año, solo superada ligeramente por la de julio, con 1.233 demandantes.
Curiosamente, vuelve a ser Boiro el municipio que registra la tasa más elevada de demandantes en la actividad industrial, con 266 inscritos. Sin embargo, el término boirense figura entre esa privilegiada treintena de municipios gallegos en los que bajó el paro durante los últimos treinta días.
El verdadero motor industrial de la comarca, a nadie se le escapa, está en la actividad pesquera. Las factorías de conservas, congelados o precocinados de productos marítimos son las que tiran del empleo e, incluso, durante los últimos meses se han registrado contrataciones en las firmas de mayor tamaño para afrontar el incremento de trabajo. Eso sí, se trata de empleo de carácter temporal.
Otro ámbito económico del área barbanzana en el que descendió el paro en octubre fue en el relativo a la pesca y la agricultura. La Consellería de Traballo computa estas dos áreas productivas de forma conjunta, por lo que no existe forma de saber qué porcentaje de la caída está directamente motivada por el inicio de la campaña marisquera en los municipios de Outes y Noia. El arranque de la actividad implica a más de mil profesionales empadronados en ambos municipios.
El número de demandantes vuelve a superar las 1.800 personas, algo que no sucedía desde julio.
Después de seis meses consecutivos de bajadas, la buena racha por la que atravesaba el sector de la construcción en lo que respecta a la contratación se ha roto y el informe oficial del paro, dado a conocer el miércoles, refleja que el desempleo en esta rama ha pasado de la tendencia descendente a la ascendente. Eso sí, por el momento las cifras de demandantes están lejos de las que se contabilizaban a principios de año, cuando había más de dos mil personas inscritas en los registros autonómicos. En la actualidad, el número es de 1.833 ciudadanos, lo que representa 48 más que los del mes de septiembre.
Cabe señalar que es Boiro el municipio barbanzano con mayor cantidad de demandantes en esta rama de actividad, con 370 anotados, lo que significa 132 más que el ayuntamiento situado en segundo lugar, Rianxo.
Un profesional del ramo que prefiere no dar su nombre, y que desde el 2006 trabaja como autónomo, señala que la competencia desleal es uno de los principales problemas a los que se enfrentan las personas que, como él, trabajan por su cuenta. Este hombre comentó que ha entregado presupuestos a particulares que luego le han dicho que no le contrataban el trabajo «porque outros facían o choio a 30 ou 35 euros a hora. Unha persoa que abona a paga de autónomos non pode traballar por ese prezo».
Oscilación de los servicios
Tampoco marchan bien las cosas en el sector servicios. La incidencia de la temporalidad es patente a poco que se examinen, mes a mes, los datos que publica la Consellería de Traballo. En enero, febrero y marzo, la cifra de ciudadanos en busca de ocupación en esta rama de actividad superaba los 4.400. Al llegar abril, la cuantía bajó a 4.300 y en agosto rondaban los 3.700. Con la conclusión del verano, la tendencia a la baja se ha invertido y ahora ya vuelve a situarse en la franja de los 4.000 el número de demandantes. Desde varios colectivos se apunta que, posiblemente, los datos correspondientes a noviembre sean todavía peores que los de octubre.
En el polo opuesto se sitúa la industria, que parece estar inmunizada contra lo que está cayendo. El índice de desocupados ha vuelto a descender en este sector económico y son 1.249 los demandantes. Esta cifra es la segunda más baja del año, solo superada ligeramente por la de julio, con 1.233 demandantes.
Curiosamente, vuelve a ser Boiro el municipio que registra la tasa más elevada de demandantes en la actividad industrial, con 266 inscritos. Sin embargo, el término boirense figura entre esa privilegiada treintena de municipios gallegos en los que bajó el paro durante los últimos treinta días.
El verdadero motor industrial de la comarca, a nadie se le escapa, está en la actividad pesquera. Las factorías de conservas, congelados o precocinados de productos marítimos son las que tiran del empleo e, incluso, durante los últimos meses se han registrado contrataciones en las firmas de mayor tamaño para afrontar el incremento de trabajo. Eso sí, se trata de empleo de carácter temporal.
Otro ámbito económico del área barbanzana en el que descendió el paro en octubre fue en el relativo a la pesca y la agricultura. La Consellería de Traballo computa estas dos áreas productivas de forma conjunta, por lo que no existe forma de saber qué porcentaje de la caída está directamente motivada por el inicio de la campaña marisquera en los municipios de Outes y Noia. El arranque de la actividad implica a más de mil profesionales empadronados en ambos municipios.
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