:lvg: | 16/3/2011
El pasado ejercicio solo se certificaron en la comarca 276 viviendas
Los datos de visados de viviendas durante el 2010, y que acaba de hacer públicos el Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG), arrojan unas cifras que solo pueden calificarse como demoledoras. Se trata del volumen de certificados más bajo de la última década. Ribeira, un municipio en el que algún año llegaron a tramitarse más de 1.500 expedientes, sufre una caída del 70% con respecto al 2009. Por el contrario, y según se cita en el propio informe elaborado por el COAG, Boiro arroja un dato mucho más favorable y experimenta un crecimiento del 200% en relación al ejercicio del 2009.
Con 90 visados, el término boirense se sitúa a la cabeza de la comarca, aunque es cierto que las cifras actuales nada tienen que ver con las que se registraban hace uno o dos años. En el polo opuesto se encuentra el municipio de Muros. Durante el segundo semestre del pasado ejercicio, el colegio de arquitectos no revisó en esta localidad ni un solo proyecto. Los siete existentes se contabilizaron en los primeros meses del año.
El de Muros no es un caso único en el conjunto de Galicia. De hecho, y según se cita en el informe del colegio, hay un total de 82 concellos, repartidos entre las cuatro provincias, que se encuentran en la misma situación.
Cuatro son los ayuntamientos en los que las cifras, sin dejar de ser nefastas, arrojan un ligero incremento con respecto a las computadas por el COAG en el 2009. Se trata, además de Boiro, de Noia, A Pobra, Lousame y Mazaricos.
Cómputo total
Durante el 2010 únicamente se visaron en los once municipios del área barbanzana 276 viviendas, lo que significa casi tres mil menos que en el 2007 y 800 menos que en el 2008. La cifra también es inferior a la del 2009.
Esto significa que, cada mes, se certificaron un total de 23 proyectos, menos de uno por jornada. En la época de bum de la construcción en la comarca se tramitaban unos nueve expedientes diarios.
La debacle en el sector constructivo ha provocado que un elevado número de obras quedasen a medio construir en la comarca. Porto do Son, Ribeira y Boiro son los ayuntamientos que se ven más afectados por esta situación.
Se calcula que el parque de inmuebles que están pendientes de vender en la zona supera las dos mil. En los primeros años de la recesión económica, algunos promotores inmobiliarios vendían el terreno con proyecto de obra incluida. En la actualidad esta situación ya no se produce. Lo que sí ha ocurrido, y así lo han indicado desde el Centro Empresarial da Construción do Barbanza, es que algunos promotores han retomado obras y, en algún caso, han concluido los trabajos iniciados hace años.
Poco optimismo
Sin embargo, tanto constructores como el responsable de la patronal del sector, Andrés Teira, se muestran poco optimistas, al menos sobre el futuro a medio plazo. En este sentido, Teira ha comentado que ve muy difícil que vuelvan a registrarse los niveles de construcción que hubo hasta el 2007. Es más, Andrés Teira considera que lo mejor para esta rama económica es que se tienda a una profesionalización. Se refiere al hecho de que, debido al bum, florecieron los promotores; personas que hasta ese momento nunca habían tenido relación alguna con la edificación.
Esta opinión de Teira es compartida por otros empresarios, quienes aseguran que al sector llegó dinero de procedencia diversa porque se veía la posibilidad de obtener grandes beneficios. El problema surgió cuando comenzaron a surgir las dificultades para la venta de pisos, ya que la adquisición se ha ralentizado de forma notable.
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«Sería deseable que la rehabilitación adquiriera el papel que le corresponde»
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Cuatro son los ayuntamientos en los que las cifras, sin dejar de ser nefastas, arrojan un ligero incremento con respecto a las computadas por el COAG en el 2009. Se trata, además de Boiro, de Noia, A Pobra, Lousame y Mazaricos.
Cómputo total
Durante el 2010 únicamente se visaron en los once municipios del área barbanzana 276 viviendas, lo que significa casi tres mil menos que en el 2007 y 800 menos que en el 2008. La cifra también es inferior a la del 2009.
Esto significa que, cada mes, se certificaron un total de 23 proyectos, menos de uno por jornada. En la época de bum de la construcción en la comarca se tramitaban unos nueve expedientes diarios.
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Se calcula que el parque de inmuebles que están pendientes de vender en la zona supera las dos mil. En los primeros años de la recesión económica, algunos promotores inmobiliarios vendían el terreno con proyecto de obra incluida. En la actualidad esta situación ya no se produce. Lo que sí ha ocurrido, y así lo han indicado desde el Centro Empresarial da Construción do Barbanza, es que algunos promotores han retomado obras y, en algún caso, han concluido los trabajos iniciados hace años.
Poco optimismo
Sin embargo, tanto constructores como el responsable de la patronal del sector, Andrés Teira, se muestran poco optimistas, al menos sobre el futuro a medio plazo. En este sentido, Teira ha comentado que ve muy difícil que vuelvan a registrarse los niveles de construcción que hubo hasta el 2007. Es más, Andrés Teira considera que lo mejor para esta rama económica es que se tienda a una profesionalización. Se refiere al hecho de que, debido al bum, florecieron los promotores; personas que hasta ese momento nunca habían tenido relación alguna con la edificación.
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