24 abril 2010

Cofradías de la ría de Muros y Noia elogian la retirada de aparejos ilegales

:ecg: | 24/04/2010
Representantes de las cuatro cofradías de la ría de Muros y Noia aplaudieron ayer la decisión de la Consellería do Mar, a través del Servizo de Gardacostas, de priorizar la retirada de aparejos ilegales para salvaguardar los recursos marinos de nuestra costa.

Esta medida está incluida dentro del plan de lucha contra el furtivismo que este departamento autonómico puso en marcha y tiene como una de sus prioridades absolutas.

El patrón mayor de Muros, Daniel Formoso, aseguró que se trata de una buena noticia, ya que considera necesario erradicar de una vez la práctica del furtivismo en nuestras rías.

De la misma forma se pronunciaron al respecto representantes del pósito noiés, aunque matizaron que sería necesario priorizar también la lucha contra los ilegales en otros sectores como el marisquero aunque no utilicen aparejos. Hay que tener en cuenta que esta cofradía factura una media de doce millones de euros al año por la venta exclusiva de marisco.

Además, la acción de los furtivos en los bancos marisqueros es uno de los problemas a los que habitualmente se tiene que enfrentar el sector.

Por su parte, el patrón mayor de Portosín, Eduardo Carreño, también valoró como muy positiva la iniciativa de la Consellería do Mar. En su opinión, este tipo de medidas ya había que ponerlas en práctica hace mucho tiempo, con el fin de acabar con el furtivismo en todas las rías y especialmente, según explicó, en las zonas más afectadas, como son las de O Burgo (en A Coruña), Ferrol, Arousa, Muros y Noia.

Asimismo, representantes de la cofradía de O Son se mostraron favorables a poner en práctica este tipo de medidas que promueve la Xunta para acabar con el furtivismo, que tanto afecta al medio marino.
Leyendo y escuchando a los representantes de las cofradías parece que solo son "ilegales los furtivos", cuando todos saben que muchos "legales también lo son", no solo por pescar o mariscar furtivamente, si no porque descargan y venden sus productos eludiendo los cauces legales. Lo que pasa es que como en el cuento de los ratones, ¿quién le pone el cascabel al gato?.

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