:logo-lvg: | Barbanza
Carnota, Mazaricos, Ribeira, O Son, Rianxo, Boiro y Noia fueron los concellos afectados entre la noche del miércoles y ayer todo el día
El fuego, o más bien los que se encargan de encenderlo, han vuelto a poner patas arriba la comarca de norte a sur. Desde Carnota hasta Rianxo, tanto por el interior como por la costa, las llamas avanzaron sin oposición desde la noche del miércoles en el monte Pindo y en Baroña. Ayer, a última hora del día, el fuego seguía descontrolado en estos dos puntos y un denso manto de humo cubría el cielo e impedía la visibilidad, por ejemplo, del monte Louro desde el municipio sonense.
La sensación de caos fue aumentando progresivamente en casi todos los ayuntamientos de Barbanza. En Ribeira, el fuego hizo acto de presencia por la mañana y de una manera casi simultánea en Aguiño, Palmeira y Oleiros. Por la tarde, los servicios de emergencias se desplazaron a Carreira por otro foco. En Rianxo, concretamente en la parroquia de Asados, los vecinos volvieron a sentir la sensación de miedo de días atrás cuando el fuego obligó a movilizar a los medios terrestres.
Otra zona que ya sabe lo que es vivir un gran incendio este verano es Tállara, en Lousame. Las llamas comenzaron poco después de las cuatro de tarde a pocos metros del cementerio. Otro camposanto que también se vio en peligro fue el de Vista Alegre, en Boiro, cuando se inició un incendio sobre las 17.30 horas que el servicio de emergencias local logró sofocar en poco tiempo.
Ayuda vecinal generalizada
Igual que pasó en los anteriores grandes incendios del verano en Barbanza -Ribeira y Moimenta-, la sensación de peligro a la que se vieron expuestos numerosos vecinos hizo que saliesen de sus casas para plantar cara a las llamas. Cubos, mangueras o palas fueron las herramientas utilizadas en Carnota, Mazaricos, Porto do Son y Noia. Aquí, un incendio que comenzó ayer poco después de las 9.00 horas a pocos metros de un taller en Santa Cristina de Barro hizo que los trabajadores saliesen con extintores y otros utensilios para evitar que el fuego entrase en su centro de trabajo.
Entre todos estos fuegos, sobresale el que arrasó el monte Pindo, un paraje totalmente devastado que hoy visitará el líder del BNG, Xavier Vence.
Más información en las páginas 2 de la sección A Fondo y de la edición de Barbanza.
El fuego, o más bien los que se encargan de encenderlo, han vuelto a poner patas arriba la comarca de norte a sur. Desde Carnota hasta Rianxo, tanto por el interior como por la costa, las llamas avanzaron sin oposición desde la noche del miércoles en el monte Pindo y en Baroña. Ayer, a última hora del día, el fuego seguía descontrolado en estos dos puntos y un denso manto de humo cubría el cielo e impedía la visibilidad, por ejemplo, del monte Louro desde el municipio sonense.
La sensación de caos fue aumentando progresivamente en casi todos los ayuntamientos de Barbanza. En Ribeira, el fuego hizo acto de presencia por la mañana y de una manera casi simultánea en Aguiño, Palmeira y Oleiros. Por la tarde, los servicios de emergencias se desplazaron a Carreira por otro foco. En Rianxo, concretamente en la parroquia de Asados, los vecinos volvieron a sentir la sensación de miedo de días atrás cuando el fuego obligó a movilizar a los medios terrestres.
Otra zona que ya sabe lo que es vivir un gran incendio este verano es Tállara, en Lousame. Las llamas comenzaron poco después de las cuatro de tarde a pocos metros del cementerio. Otro camposanto que también se vio en peligro fue el de Vista Alegre, en Boiro, cuando se inició un incendio sobre las 17.30 horas que el servicio de emergencias local logró sofocar en poco tiempo.
Ayuda vecinal generalizada
Igual que pasó en los anteriores grandes incendios del verano en Barbanza -Ribeira y Moimenta-, la sensación de peligro a la que se vieron expuestos numerosos vecinos hizo que saliesen de sus casas para plantar cara a las llamas. Cubos, mangueras o palas fueron las herramientas utilizadas en Carnota, Mazaricos, Porto do Son y Noia. Aquí, un incendio que comenzó ayer poco después de las 9.00 horas a pocos metros de un taller en Santa Cristina de Barro hizo que los trabajadores saliesen con extintores y otros utensilios para evitar que el fuego entrase en su centro de trabajo.
Entre todos estos fuegos, sobresale el que arrasó el monte Pindo, un paraje totalmente devastado que hoy visitará el líder del BNG, Xavier Vence.
Más información en las páginas 2 de la sección A Fondo y de la edición de Barbanza.
0 comentarios:
Publicar un comentario