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El buen tiempo permitió avanzar en los movimientos de tierra
Hace ya un tiempo que el viaducto de la variante que cruza el estuario noiés cambió para siempre la imagen de la ría. Sin embargo, es ahora cuando la estructura más emblemática y polémica de la circunvalación cobra toda su dimensión porque, a unos meses de que se cumpla el plazo dado por el Ejecutivo autonómico para la entrada en funcionamiento de la carretera, ambos márgenes de la ría están ya unidos. Aunque todavía queda trabajo por delante en el puente que ya comunica Testal y A Barquiña, la obra va muy avanzada. No en vano, el porcentaje de ejecución de la actuación supera el 90%.
Los cambios en el enorme viaducto que atraviesa el estuario se hacen evidentes día a día. Ahora que el tablero ya está prácticamente ejecutado por completo, toca ultimar detalles. Así, por ejemplo, desde la villa noiesa se aprecia el avance de las tareas de instalación de la barandilla del puente.
Aunque la más visible, esta no es la única estructura que se está ejecutando para rematar una variante de Noia que se hizo de rogar durante años. También Orro es un punto importante de los trabajos. En las últimas semanas se ha avanzado de forma definitiva en la construcción del paso elevado que conectará la circunvalación con el corredor a Santiago.
Con estos avances en ambos puentes, el grado de ejecución del apartado de las estructuras, el de más peso en el proyecto, supera el 90%.
Movimientos de tierra
Otra parte importante de la actuación la constituyen los movimientos de tierra, unos trabajos que han podido retomarse con la mejora de las condiciones meteorológicas. En este caso, desde la Consellería de Medio Ambiente cifran en un 90% el grado de ejecución de las tareas que se están realizando. Asimismo, según explicaron fuentes de la Administración autonómica, también se está trabajando en las obras de drenaje longitudinal.
Pese a que la actuación avanza a buen ritmo y cada vez falta menos para llegar al verano, plazo dado por la Xunta para la puesta en funcionamiento de la variante, desde la consellería no se aventuran a hacer una previsión más concreta sobre la fecha en la que los primeros coches cruzarán el viaducto. Será en la época estival, pero habrá que esperar para saber si será en junio o tardará algunas semanas más en abrirse al tráfico.
Hace ya un tiempo que el viaducto de la variante que cruza el estuario noiés cambió para siempre la imagen de la ría. Sin embargo, es ahora cuando la estructura más emblemática y polémica de la circunvalación cobra toda su dimensión porque, a unos meses de que se cumpla el plazo dado por el Ejecutivo autonómico para la entrada en funcionamiento de la carretera, ambos márgenes de la ría están ya unidos. Aunque todavía queda trabajo por delante en el puente que ya comunica Testal y A Barquiña, la obra va muy avanzada. No en vano, el porcentaje de ejecución de la actuación supera el 90%.
Los cambios en el enorme viaducto que atraviesa el estuario se hacen evidentes día a día. Ahora que el tablero ya está prácticamente ejecutado por completo, toca ultimar detalles. Así, por ejemplo, desde la villa noiesa se aprecia el avance de las tareas de instalación de la barandilla del puente.
Aunque la más visible, esta no es la única estructura que se está ejecutando para rematar una variante de Noia que se hizo de rogar durante años. También Orro es un punto importante de los trabajos. En las últimas semanas se ha avanzado de forma definitiva en la construcción del paso elevado que conectará la circunvalación con el corredor a Santiago.
Con estos avances en ambos puentes, el grado de ejecución del apartado de las estructuras, el de más peso en el proyecto, supera el 90%.
Movimientos de tierra
Otra parte importante de la actuación la constituyen los movimientos de tierra, unos trabajos que han podido retomarse con la mejora de las condiciones meteorológicas. En este caso, desde la Consellería de Medio Ambiente cifran en un 90% el grado de ejecución de las tareas que se están realizando. Asimismo, según explicaron fuentes de la Administración autonómica, también se está trabajando en las obras de drenaje longitudinal.
Pese a que la actuación avanza a buen ritmo y cada vez falta menos para llegar al verano, plazo dado por la Xunta para la puesta en funcionamiento de la variante, desde la consellería no se aventuran a hacer una previsión más concreta sobre la fecha en la que los primeros coches cruzarán el viaducto. Será en la época estival, pero habrá que esperar para saber si será en junio o tardará algunas semanas más en abrirse al tráfico.
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