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El fin de semana se disputó en aguas de la ría de Muros-Noia la séptima edición del concurso de pesca de fondo que organizó el Real Club Náutico de Portosín. Los ganadores de esta edición fueron los componentes de la embarcación Kañarte. Los barcos participantes cedieron todas sus capturas a Cáritas de la localidad.
Los participantes salieron para el mar a primera hora del sábado en una mañana muy buena para la práctica de este deporte con una temperatura muy agradable y un mar en calma, aunque la brisa aumentó un poco al mediodía.
Las perspectivas de pesca no eran nada buenas, pues en las últimas semanas las capturas son escasas. Las embarcaciones participantes tenían como hora límite de regreso las dos de la tarde. Nada más llegar a tierra se realizó la pesada y los deportistas fueron agasajados por el Náutico con un refrigerio.
Pez más grande
Un total de veinte pescadores participaron en esta edición en la que hubo buenas capturas. Los tripulantes del Kañarte se hicieron con el primer puesto, mientras que en segundo lugar quedó el Picote. El tercer peldaño del podio fue para los integrantes del Trastada, mientras que el Pedras Miúdas acabó en cuarto lugar.
El buen ambiente reinó durante la competición. Prueba de ello es que al Pedras Miúdas se le concedió el premio al pez más grande, un pinto, aunque tres barcos tenían ejemplares similares, pero se acordó cedérselo al ser el primero en ir al pesaje.
Por otra parte, cabe indicar que la embarcación de Arturo Moares, Trastada, fue la menos afortunada del concurso. Y es que capturó un pinto muy grande, el mayor de toda la competición, pero cuando estaba a punto de subirlo a bordo, se le rompió el sedal.
A pesar de este infortunio, la tripulación tuvo su recompensa. Recogió en medio del mar un perro, a tres millas de tierra y que estaba nadando casi sin fuerzas. Fue rescatado y llevado a tierra. Ahora el can, al que le pusieron Moisés, se recupera con una familia noiesa.
Los participantes salieron para el mar a primera hora del sábado en una mañana muy buena para la práctica de este deporte con una temperatura muy agradable y un mar en calma, aunque la brisa aumentó un poco al mediodía.
Las perspectivas de pesca no eran nada buenas, pues en las últimas semanas las capturas son escasas. Las embarcaciones participantes tenían como hora límite de regreso las dos de la tarde. Nada más llegar a tierra se realizó la pesada y los deportistas fueron agasajados por el Náutico con un refrigerio.
Pez más grande
Un total de veinte pescadores participaron en esta edición en la que hubo buenas capturas. Los tripulantes del Kañarte se hicieron con el primer puesto, mientras que en segundo lugar quedó el Picote. El tercer peldaño del podio fue para los integrantes del Trastada, mientras que el Pedras Miúdas acabó en cuarto lugar.
El buen ambiente reinó durante la competición. Prueba de ello es que al Pedras Miúdas se le concedió el premio al pez más grande, un pinto, aunque tres barcos tenían ejemplares similares, pero se acordó cedérselo al ser el primero en ir al pesaje.
Por otra parte, cabe indicar que la embarcación de Arturo Moares, Trastada, fue la menos afortunada del concurso. Y es que capturó un pinto muy grande, el mayor de toda la competición, pero cuando estaba a punto de subirlo a bordo, se le rompió el sedal.
A pesar de este infortunio, la tripulación tuvo su recompensa. Recogió en medio del mar un perro, a tres millas de tierra y que estaba nadando casi sin fuerzas. Fue rescatado y llevado a tierra. Ahora el can, al que le pusieron Moisés, se recupera con una familia noiesa.
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