:lvg: | 3/12/2010
No quieren que les pase como el año pasado. Los armadores del cerco de Portosín que en la campaña anterior participaron en la costera del verdel en el País Vasco, se quejaron de que tuvo una duración mínima, pues el total admisible de capturas (TAC) se agotó en muy pocas semanas. Para evitar una situación similar, proponen al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino que los topes se distribuyan por marinero y día, pues entienden que así la actividad extractiva de esta especie tendría una mayor duración.
Hace unos días la Federación Galega de Confrarías remitió un escrito al pósito sonense en el que da cuenta de la modificación de la orden por la que se establecen los criterios para el reparto y la gestión de la cuota de la caballa, así como la regularización de su captura y su desembarque.
La modificación afecta solo a tres artículos. El primero se refiere al volumen de capturas, pasando de las dieciocho toneladas a las ocho por buque y día tanto para el arrastre como para el cerco. Otro se refiere al control y seguimiento de la flota y el último al exceso de las capturas permitidas.
La intención de la entidad sonense es evitar la saturación del mercado y también la caída de los precios. La propuesta de los armadores sonenses es similar a la de la Federación Galega de Confrarías que pretenden que cada embarcación pueda pescar ocho toneladas al día para todo el año. Sin embargo, para aquellas naves que participen en la costera del verdel en el País Vasco, la cifra es de 40 toneladas a la semana.
Los cerqueros de Portosín también remitieron en sus peticiones que se reserve un 7% del tope admisible de capturas para el segundo semestre del año, pues en este ejercicio no se pudo capturar xarda en los caladeros gallegos al estar agotados los cupos.
Las embarcaciones pequeñas no pudieron coger ningún kilo este año al prohibirlo la Administración debido a que se agotó rápidamente el TAC.
Hace unos días la Federación Galega de Confrarías remitió un escrito al pósito sonense en el que da cuenta de la modificación de la orden por la que se establecen los criterios para el reparto y la gestión de la cuota de la caballa, así como la regularización de su captura y su desembarque.
La modificación afecta solo a tres artículos. El primero se refiere al volumen de capturas, pasando de las dieciocho toneladas a las ocho por buque y día tanto para el arrastre como para el cerco. Otro se refiere al control y seguimiento de la flota y el último al exceso de las capturas permitidas.
La intención de la entidad sonense es evitar la saturación del mercado y también la caída de los precios. La propuesta de los armadores sonenses es similar a la de la Federación Galega de Confrarías que pretenden que cada embarcación pueda pescar ocho toneladas al día para todo el año. Sin embargo, para aquellas naves que participen en la costera del verdel en el País Vasco, la cifra es de 40 toneladas a la semana.
Los cerqueros de Portosín también remitieron en sus peticiones que se reserve un 7% del tope admisible de capturas para el segundo semestre del año, pues en este ejercicio no se pudo capturar xarda en los caladeros gallegos al estar agotados los cupos.
Las embarcaciones pequeñas no pudieron coger ningún kilo este año al prohibirlo la Administración debido a que se agotó rápidamente el TAC.
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