:logo-lvg: | Barbanza
En el municipio noiés y en aldeas de Outes, Lousame y O Son no tuvieron televisión hasta ayer porque un rayo calcinó el transformador de San Lois
El reguero de incidencias que dejó la ciclogénesis Dirk en la comarca entre el martes y el miércoles obligó a los equipos de emergencias de cada ayuntamiento a emplearse a fondo para que los efectos del mal tiempo causasen los menores contratiempos posibles a los vecinos y los servicios básicos no se viesen afectados. En total, y siguiendo la línea que marca la costa de Rianxo a Carnota, e incluyendo municipios de interior como Lousame o Mazaricos, se realizaron más de 100 intervenciones de urgencia en 24 horas.
Se trata de actuaciones que, en su mayoría, se resolvieron con agilidad. Aunque hubo otras que requirieron el trabajo de técnicos que no pudieron trabajar en la tarde del martes y fue necesario posponer su actuación hasta el miércoles o ayer. La más grave, y que afectó a todas las viviendas del municipio noiés (14.757 vecinos) y a otras de Outes, Lousame y O Son, se registró en el transformador de televisión que hay en el monte San Lois y en sus repetidores. Un rayo calcinó buena parte de esta instalación dejando sin servicio a miles de barbanzanos. La avería estaba casi solventada al cierre de esta edición.
Otro rayo, esta vez en Lousame, dejó sin luz a los cerca de 300 vecinos que residen en los núcleos de Aldea Grande, Marracín y Tállara desde el martes y hasta el miércoles a última hora de la tarde.
Aunque la dureza con la que llegó Dirk a la comarca comenzó a remitir el miércoles a última hora, ayer la lluvia siguió cayendo con la misma intensidad. Uno de los efectos negativos se podía ver en el río Sieira a su paso por el municipio sonense. Y es que el caudal desbordó en los lugares de A Barcia, parroquia de Caamaño, y Xunqueiras, en Xuño, para inundar un buen número de fincas dedicadas a diferentes cultivos.
Calma chicha
La jornada de ayer fue relativamente tranquila después del reguero de actuaciones realizadas entre el martes y el miércoles. Retirar algún árbol caído o achicar bolsas de agua en carreteras fueron las intervenciones más comunes a la espera de que el fuerte viento vuelva a hacer acto de presencia.
Unos 300 vecinos lousamianos pasaron sin luz la Nochebuena y el día de Navidad
El reguero de incidencias que dejó la ciclogénesis Dirk en la comarca entre el martes y el miércoles obligó a los equipos de emergencias de cada ayuntamiento a emplearse a fondo para que los efectos del mal tiempo causasen los menores contratiempos posibles a los vecinos y los servicios básicos no se viesen afectados. En total, y siguiendo la línea que marca la costa de Rianxo a Carnota, e incluyendo municipios de interior como Lousame o Mazaricos, se realizaron más de 100 intervenciones de urgencia en 24 horas.
Se trata de actuaciones que, en su mayoría, se resolvieron con agilidad. Aunque hubo otras que requirieron el trabajo de técnicos que no pudieron trabajar en la tarde del martes y fue necesario posponer su actuación hasta el miércoles o ayer. La más grave, y que afectó a todas las viviendas del municipio noiés (14.757 vecinos) y a otras de Outes, Lousame y O Son, se registró en el transformador de televisión que hay en el monte San Lois y en sus repetidores. Un rayo calcinó buena parte de esta instalación dejando sin servicio a miles de barbanzanos. La avería estaba casi solventada al cierre de esta edición.
Otro rayo, esta vez en Lousame, dejó sin luz a los cerca de 300 vecinos que residen en los núcleos de Aldea Grande, Marracín y Tállara desde el martes y hasta el miércoles a última hora de la tarde.
Aunque la dureza con la que llegó Dirk a la comarca comenzó a remitir el miércoles a última hora, ayer la lluvia siguió cayendo con la misma intensidad. Uno de los efectos negativos se podía ver en el río Sieira a su paso por el municipio sonense. Y es que el caudal desbordó en los lugares de A Barcia, parroquia de Caamaño, y Xunqueiras, en Xuño, para inundar un buen número de fincas dedicadas a diferentes cultivos.
Calma chicha
La jornada de ayer fue relativamente tranquila después del reguero de actuaciones realizadas entre el martes y el miércoles. Retirar algún árbol caído o achicar bolsas de agua en carreteras fueron las intervenciones más comunes a la espera de que el fuerte viento vuelva a hacer acto de presencia.
Unos 300 vecinos lousamianos pasaron sin luz la Nochebuena y el día de Navidad
0 comentarios:
Publicar un comentario