Demetrio Gundín Castro |
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El empresario analiza los retos de la nueva directiva que encabeza
Pontevedrés de origen y barbanzano de adopción, Demetrio Gundín Castro (Pontevedra, 1970) acaba de estrenarse como presidencia de la Asociación de Empresarios Sonenses. Una entidad que en la actualidad cuenta con más de 140 asociaciones que Gundín espera incrementar en esta nueva etapa.
-¿Sorprendido de que no hubiesen más candidaturas para presidir la patronal?
-Relativamente. Al final, este cargo como otro cualquiera genera responsabilidades y la gente no quiere compromisos. Además, hay que entender que estamos expuestos a las críticas públicas y eso no es fácil.
-Y la directiva con la que contará, ¿es continuista?
-Continuista pero la directiva no es algo que me preocupe demasiado. Entendemos que lo importante son las colaboraciones sectoriales que podamos encontrar. Por ejemplo, en la hostelería buscamos empresarios que se comprometan con nosotros aunque no pertenezcan a la asociación. Y así en cada sector.
-¿Cuáles son los retos con los que echa a andar la nueva directiva?
-Principalmente seguir en la línea en la que estábamos, que es defender los intereses de nuestros asociados en general con los pocos recursos con los que contamos y dentro del papel de colaboración que mantenemos con las instituciones. El polígono industrial, un proyecto de dinamización turística que entendemos que es algo más que merecido, vías de comunicación e indicaciones en estas vías son las demandas más urgentes en el municipio.
-Un reto inminente es la fiesta del pulpo, que tendrá lugar a mediados de agosto.
-Ya llevamos 17 años organizándola y ahora buscamos más colaboración en el Concello ya que su repercusión así lo merece. Desde hace tiempo ya contamos con otros colectivos pero la intención se seguir creciendo en colaboraciones.
-Conseguir la catalogación de fiesta de interés turístico gallego es otra aspiración.
-Eso es algo que entendemos que tiene que ser inmediato ya que llueve sobre mojado. Lo denegaron el año pasado pero lo solicitaremos otra vez.
-El hecho de que su antecesor en el cargo sea el alcalde sonense y sus relaciones con la Xunta sean fluidas, ¿puede agilizar el proceso?
-Esto es alentador ya que así tendremos una vía directa con una institución superior. Sinceramente creo que las Administraciones tienen una deuda histórica con Porto do Son, aunque también es cierto que estamos encaminados correctamente.
-Otra gran demanda pendiente es lograr el polígono industrial.
-Esa es una de las deudas históricas a las que me refería.
-Y con la situación económica actual, ¿pueden garantizar que existe una demanda de suelo por parte de las empresas o aún hay que buscarla?
-Demanda hay en el momento en que existen empresas implantadas en el municipio que tienen una situación urbanística comprometida y un desarrollo inviable. Aquí hay un porcentaje muy alto de terreno sometido a protección medioambiental, por lo tanto es incompatible con el desarrollo de industrias que ya existen a día de hoy. Por ello, si queremos defender la poca industria que hay tenemos que darle suelo. Tampoco pedimos un polígono industrial, sino que califiquen suelo para poder desarrollar nuestras empresas en la situación que merecen.
-Qué es prioritario: ¿Lograr buenas vías de comunicación o sacar adelante el polígono?
-Las buenas carreteras son imprescindibles en general, ya no solo para los empresarios.
-¿Cree que Porto do Son se ha estancado al compararse con otros términos de la comarca?
-Me gusta ser autocrítico y en Porto do Son a veces nos enredamos demasiado en discusiones de taberna y no nos preocupamos de verdad por los objetivos. De verdad creo que si luchamos por los objetivos de forma común saldremos adelante.
-Un tema importante para los empresarios es la dinamización del castro de Baroña, algo que puede incrementar el turismo local.
-Entendemos que el castro es un emblema del que tenemos que presumir pero nuestro papel está muy limitado. Lo que está claro es que si consigue atraer gente nuestro papel será conseguir que se sientan cómodos, se queden y regresen.
-¿Opina que la patronal es un buen trampolín para dar el salto a la escena política?
-En mi caso, dar el salto a la política es algo que descarto rotundamente.
Pontevedrés de origen y barbanzano de adopción, Demetrio Gundín Castro (Pontevedra, 1970) acaba de estrenarse como presidencia de la Asociación de Empresarios Sonenses. Una entidad que en la actualidad cuenta con más de 140 asociaciones que Gundín espera incrementar en esta nueva etapa.
-¿Sorprendido de que no hubiesen más candidaturas para presidir la patronal?
-Relativamente. Al final, este cargo como otro cualquiera genera responsabilidades y la gente no quiere compromisos. Además, hay que entender que estamos expuestos a las críticas públicas y eso no es fácil.
-Y la directiva con la que contará, ¿es continuista?
-Continuista pero la directiva no es algo que me preocupe demasiado. Entendemos que lo importante son las colaboraciones sectoriales que podamos encontrar. Por ejemplo, en la hostelería buscamos empresarios que se comprometan con nosotros aunque no pertenezcan a la asociación. Y así en cada sector.
-¿Cuáles son los retos con los que echa a andar la nueva directiva?
-Principalmente seguir en la línea en la que estábamos, que es defender los intereses de nuestros asociados en general con los pocos recursos con los que contamos y dentro del papel de colaboración que mantenemos con las instituciones. El polígono industrial, un proyecto de dinamización turística que entendemos que es algo más que merecido, vías de comunicación e indicaciones en estas vías son las demandas más urgentes en el municipio.
-Un reto inminente es la fiesta del pulpo, que tendrá lugar a mediados de agosto.
-Ya llevamos 17 años organizándola y ahora buscamos más colaboración en el Concello ya que su repercusión así lo merece. Desde hace tiempo ya contamos con otros colectivos pero la intención se seguir creciendo en colaboraciones.
-Conseguir la catalogación de fiesta de interés turístico gallego es otra aspiración.
-Eso es algo que entendemos que tiene que ser inmediato ya que llueve sobre mojado. Lo denegaron el año pasado pero lo solicitaremos otra vez.
-El hecho de que su antecesor en el cargo sea el alcalde sonense y sus relaciones con la Xunta sean fluidas, ¿puede agilizar el proceso?
-Esto es alentador ya que así tendremos una vía directa con una institución superior. Sinceramente creo que las Administraciones tienen una deuda histórica con Porto do Son, aunque también es cierto que estamos encaminados correctamente.
-Otra gran demanda pendiente es lograr el polígono industrial.
-Esa es una de las deudas históricas a las que me refería.
-Y con la situación económica actual, ¿pueden garantizar que existe una demanda de suelo por parte de las empresas o aún hay que buscarla?
-Demanda hay en el momento en que existen empresas implantadas en el municipio que tienen una situación urbanística comprometida y un desarrollo inviable. Aquí hay un porcentaje muy alto de terreno sometido a protección medioambiental, por lo tanto es incompatible con el desarrollo de industrias que ya existen a día de hoy. Por ello, si queremos defender la poca industria que hay tenemos que darle suelo. Tampoco pedimos un polígono industrial, sino que califiquen suelo para poder desarrollar nuestras empresas en la situación que merecen.
-Qué es prioritario: ¿Lograr buenas vías de comunicación o sacar adelante el polígono?
-Las buenas carreteras son imprescindibles en general, ya no solo para los empresarios.
-¿Cree que Porto do Son se ha estancado al compararse con otros términos de la comarca?
-Me gusta ser autocrítico y en Porto do Son a veces nos enredamos demasiado en discusiones de taberna y no nos preocupamos de verdad por los objetivos. De verdad creo que si luchamos por los objetivos de forma común saldremos adelante.
-Un tema importante para los empresarios es la dinamización del castro de Baroña, algo que puede incrementar el turismo local.
-Entendemos que el castro es un emblema del que tenemos que presumir pero nuestro papel está muy limitado. Lo que está claro es que si consigue atraer gente nuestro papel será conseguir que se sientan cómodos, se queden y regresen.
-¿Opina que la patronal es un buen trampolín para dar el salto a la escena política?
-En mi caso, dar el salto a la política es algo que descarto rotundamente.
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