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La embarcación de recreo se fue a pique a trescientos metros de la orilla
Dos pescadores fueron rescatados a trescientos metros de la orilla de la playa de Aguieira, en el municipio de Porto do Son, al irse a pique la embarcación de recreo en la que navegaban. Los hechos ocurrieron alrededor de las cinco y media de la tarde del jueves cuando, al parecer, los hombres se percataron de que había una avería en el barco y este comenzó a hundirse.
Fueron los bañistas del arenal los que se dieron cuenta de que alguna emergencia estaba ocurriendo, ya que los pescadores comenzaron a gritar y a agitar los brazos para llamar su atención. La tranquila jornada de playa se vio alterada, causando el accidente gran expectación entre los veraneantes del arenal. Y es que, además, la playa estaba repleta, debido el caluroso día que azotó toda la comarca de Barbanza.
Para llevar a cabo el rescate, una lancha de los socorristas llegó al lugar en el que se hundía el barco. Salvamento Marítimo también fue avisado, aunque no llegó a intervenir al ser los hombres rápidamente recogidos por los servicios de emergencias del municipio.
Al llegar a la orilla, los pescadores deportivos fueron atendidos por miembros del equipo de Protección Civil de la localidad de Porto do Son, que también se desplazaron al lugar de los hechos. Aparentemente, ninguno de ellos presentaba heridas, tan solo se encontraban muy nerviosos, por lo que no fue necesario su traslado a un centro médico.
Sin rastro del barco
Los equipos de emergencia no lograron localizar la embarcación desde el momento de su hundimiento. Al cierre de esta edición, todavía no había ni rastro del barco de recreo accidentado.
Dos pescadores fueron rescatados a trescientos metros de la orilla de la playa de Aguieira, en el municipio de Porto do Son, al irse a pique la embarcación de recreo en la que navegaban. Los hechos ocurrieron alrededor de las cinco y media de la tarde del jueves cuando, al parecer, los hombres se percataron de que había una avería en el barco y este comenzó a hundirse.
Fueron los bañistas del arenal los que se dieron cuenta de que alguna emergencia estaba ocurriendo, ya que los pescadores comenzaron a gritar y a agitar los brazos para llamar su atención. La tranquila jornada de playa se vio alterada, causando el accidente gran expectación entre los veraneantes del arenal. Y es que, además, la playa estaba repleta, debido el caluroso día que azotó toda la comarca de Barbanza.
Para llevar a cabo el rescate, una lancha de los socorristas llegó al lugar en el que se hundía el barco. Salvamento Marítimo también fue avisado, aunque no llegó a intervenir al ser los hombres rápidamente recogidos por los servicios de emergencias del municipio.
Al llegar a la orilla, los pescadores deportivos fueron atendidos por miembros del equipo de Protección Civil de la localidad de Porto do Son, que también se desplazaron al lugar de los hechos. Aparentemente, ninguno de ellos presentaba heridas, tan solo se encontraban muy nerviosos, por lo que no fue necesario su traslado a un centro médico.
Sin rastro del barco
Los equipos de emergencia no lograron localizar la embarcación desde el momento de su hundimiento. Al cierre de esta edición, todavía no había ni rastro del barco de recreo accidentado.
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