:lvg: | 1/5/2011
Unos 800 mayores sonenses asistieron al encuentro de confraternidad
Un año más, y ya suman once, los mayores de Porto do Son recibieron ayer el reconocimiento que se merecen por una vida dedicada al trabajo, a sus familias y a hacer posible el progreso y crecimiento económico. Ahora, llegado el momento del ansiado descanso, el Concello les tributa un homenaje en forma de almuerzo de confraternidad.
Unas 800 personas del municipio acudieron a la cita, que tuvo su punto de partida con una misa oficiada en la iglesia de San Vicente de Noal en la que, cumpliendo con la tradición, la Coral Virxe do Carme se encargó del apartado musical. La organización corrió a cargo de la edila de Servizos Sociais, Joaquina González, quien aprovechó su intervención previa al inicio de la comida para expresar su agradecimiento no solo a los asistentes, sino también a quienes hacen posible la cita: como el director del colegio Santa Irene, Protección Civil, Servizos Sociais y voluntarios.
Por su parte, el mandatario, Xoán Pastor Rodríguez, elogió el trabajo de los mayores y la teniente de alcalde, Ánxela Franco, entonó un feliz día de la madre y, además, entregó un ramo de margaritas a la edila de Servizos Sociais.
Mucha marcha
Servido por el Hotel Congreso, el pabellón del Santa Irene se convirtió en un inmenso comedor en el que desde el primer momento proliferaron los brindis, las risas y los saludos efusivos entre los asistentes.
Era un día de fiesta y así lo vivieron todos. Generalmente, esta cita se celebra el 1 de mayo pero en esta ocasión, a petición de los homenajeados, se ha realizado el 30 para que no coincidiese con el día de la madre.
Después de un ágape que discurrió entre conversaciones y movimientos de comensales de una mesa a otra, llegó el momento del baile. La música la puso la orquesta Odisea y prácticamente no quedó nadie que no meneara, aunque solo fuera durante un par de minutos, el esqueleto.
Entre un baile y otro el tiempo fue pasando y llegaron las siete de la tarde, a partir de ese momento comenzó el desfile de autobuses para trasladar a los invitados a sus respectivas localidades. El encuentro había concluido y ya se piensa en la cita del próximo año.
Un año más, y ya suman once, los mayores de Porto do Son recibieron ayer el reconocimiento que se merecen por una vida dedicada al trabajo, a sus familias y a hacer posible el progreso y crecimiento económico. Ahora, llegado el momento del ansiado descanso, el Concello les tributa un homenaje en forma de almuerzo de confraternidad.
Unas 800 personas del municipio acudieron a la cita, que tuvo su punto de partida con una misa oficiada en la iglesia de San Vicente de Noal en la que, cumpliendo con la tradición, la Coral Virxe do Carme se encargó del apartado musical. La organización corrió a cargo de la edila de Servizos Sociais, Joaquina González, quien aprovechó su intervención previa al inicio de la comida para expresar su agradecimiento no solo a los asistentes, sino también a quienes hacen posible la cita: como el director del colegio Santa Irene, Protección Civil, Servizos Sociais y voluntarios.
Por su parte, el mandatario, Xoán Pastor Rodríguez, elogió el trabajo de los mayores y la teniente de alcalde, Ánxela Franco, entonó un feliz día de la madre y, además, entregó un ramo de margaritas a la edila de Servizos Sociais.
Mucha marcha
Servido por el Hotel Congreso, el pabellón del Santa Irene se convirtió en un inmenso comedor en el que desde el primer momento proliferaron los brindis, las risas y los saludos efusivos entre los asistentes.
Era un día de fiesta y así lo vivieron todos. Generalmente, esta cita se celebra el 1 de mayo pero en esta ocasión, a petición de los homenajeados, se ha realizado el 30 para que no coincidiese con el día de la madre.
Después de un ágape que discurrió entre conversaciones y movimientos de comensales de una mesa a otra, llegó el momento del baile. La música la puso la orquesta Odisea y prácticamente no quedó nadie que no meneara, aunque solo fuera durante un par de minutos, el esqueleto.
Entre un baile y otro el tiempo fue pasando y llegaron las siete de la tarde, a partir de ese momento comenzó el desfile de autobuses para trasladar a los invitados a sus respectivas localidades. El encuentro había concluido y ya se piensa en la cita del próximo año.
Todo el mundo preguntándose a cuento de que venia el cambio de fecha y resulta que segundo el bigobierno, fueron los propios homenajeados los que pidieron. ¿Cuando se hizo la consulta o "quienes" fueron los que lo propusieron? Extraña que para unas cosas presuntamente se tenga en cuenta a los vecinos y para el resto, no.
3 comentarios:
o cambio de fecha me parece oportuno, en primero lugar,a todos nos gusta disfrutar del día de la madre en familia, no sé a q viene q el dia de la madre se convierta en el dia de los mayores; y en segundo lugar el 1 de mayo se debe recordar por otras cosas q no por comida de mayores...
o cambio fixose prar facer propaganda electoral oportunista por parte dos que nos gobernan, asi aproveitan e fan campaña a conta do concello, ou non lembrades que estamos en tempo de elecccions, simplelente oportunismo.E decirrle os vellos que moito se lembran deless. jajajaja
discrepo; eu creo q nn ten nada q ver co q dis, nn é o primeiro ano q se fai, se non me equivoco leva 10 anos, e sempre é en maio,non se cambio de data para aproximar ás eleccions; polo q non se pode ver xigantes dond so hai muiños
de todas formas se de min dependese esto desaparecería, ou sería cofianciado con particular interesado; xa q me parece un gasto innecesario q o noso concello,e nos como contribuíntes, non podemos asumir; cuestión de prioridades imaxino
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