:lvg: | 10/07/2010
Xoán Pastor Rodríguez dice que «hai que ver como quedan as modificacións cando se rematen».
Tras la tormenta llega la calma en la parroquia sonense de Xuño. O al menos eso parece después de las explicaciones dadas ayer por la directora del proyecto, que incluye las reformas de seguridad vial en la AC-550 a su paso por esta parroquia, y el jefe de infraestructuras de la Xunta en la provincia de A Coruña. Aclaraciones que tuvieron que ser ofrecidas a los propietarios en sus propias casas, después de suspender la asamblea convocada para tal fin por el tono acalorado de los enfrentamientos entre los propios vecinos o los improperios dirigidos a los funcionarios encargados de la obra.
El recorrido incluyó el total de las 64 parcelas afectadas, resolviendo las disputas con 62 de los damnificados, tal y como confirmó el portavoz vecinal, José María Rego: «Con el plano en la mano, todo se resolvió mucho mejor y, a excepción de dos propietarios a los que resulta muy difícil no expropiarles el terreno fijado, el resto se han quedado muy tranquilos después de escuchar a los técnicos de la Xunta que vinieron hasta aquí».
Fue precisamente Rego el que explicó que en el caso de estos dos terrenos, «se acordó con los técnicos estudiar la posibilidad de permutar con los dueños de dos fincas anexas los metros necesarios para evitar así un mal mayor. Pero esto es algo que hay que estudiar y no quedó cerrado».
María Dolores Sanlés es una de las titulares afectadas y aunque reconoce que no está en contra de la obra, ya que es consciente del buen servicio que hará, afirma que «en casa estamos disgustados, ya que existe solución para todos menos para nosotros».
Xoán Pastor Rodríguez, regidor de Porto do Son, declaró en este sentido que «hai que ver como quedan as modificacións cando se rematen xa que unha cousa é dicilas de palabra e outra é comprobar como quedan ao final».
Críticas al alcalde
El PP sonense, por su parte, notificó que Rodríguez «non tivo a dignidade de acompañar e ir defender os intereses dos seus veciños na reunión técnica». Además, los populares exponen que la obra «é complementaria á realizada no seu momento polo ente público Augas de Galicia» y que el regidor «debe explicarlles aos afectados os incongruentes e malintencionados anuncios de demolición de muros e hórreos, xa que dende o PP de Porto do Son afirmamos sempre o que onte corroboraron os técnicos da Xunta».
Tras la tormenta llega la calma en la parroquia sonense de Xuño. O al menos eso parece después de las explicaciones dadas ayer por la directora del proyecto, que incluye las reformas de seguridad vial en la AC-550 a su paso por esta parroquia, y el jefe de infraestructuras de la Xunta en la provincia de A Coruña. Aclaraciones que tuvieron que ser ofrecidas a los propietarios en sus propias casas, después de suspender la asamblea convocada para tal fin por el tono acalorado de los enfrentamientos entre los propios vecinos o los improperios dirigidos a los funcionarios encargados de la obra.
El recorrido incluyó el total de las 64 parcelas afectadas, resolviendo las disputas con 62 de los damnificados, tal y como confirmó el portavoz vecinal, José María Rego: «Con el plano en la mano, todo se resolvió mucho mejor y, a excepción de dos propietarios a los que resulta muy difícil no expropiarles el terreno fijado, el resto se han quedado muy tranquilos después de escuchar a los técnicos de la Xunta que vinieron hasta aquí».
Fue precisamente Rego el que explicó que en el caso de estos dos terrenos, «se acordó con los técnicos estudiar la posibilidad de permutar con los dueños de dos fincas anexas los metros necesarios para evitar así un mal mayor. Pero esto es algo que hay que estudiar y no quedó cerrado».
María Dolores Sanlés es una de las titulares afectadas y aunque reconoce que no está en contra de la obra, ya que es consciente del buen servicio que hará, afirma que «en casa estamos disgustados, ya que existe solución para todos menos para nosotros».
Xoán Pastor Rodríguez, regidor de Porto do Son, declaró en este sentido que «hai que ver como quedan as modificacións cando se rematen xa que unha cousa é dicilas de palabra e outra é comprobar como quedan ao final».
Críticas al alcalde
El PP sonense, por su parte, notificó que Rodríguez «non tivo a dignidade de acompañar e ir defender os intereses dos seus veciños na reunión técnica». Además, los populares exponen que la obra «é complementaria á realizada no seu momento polo ente público Augas de Galicia» y que el regidor «debe explicarlles aos afectados os incongruentes e malintencionados anuncios de demolición de muros e hórreos, xa que dende o PP de Porto do Son afirmamos sempre o que onte corroboraron os técnicos da Xunta».
Don erre que erre. Don Rodrigo de Quesada, creí que se había muerto el mismo día que Paco Martínez Soria, a quien dió vida en la película que llevaba ese título, pero no, aun quedan muchos para los que su medio de vida es la política y la manipulación.
Que por mediación del Grupo Municipal del PP de Porto do Son, los técnicos de la Xunta de Galicia se hayan desplazado a Xuño para informar a los afectados de las reformas a realizar en la AC-550 a su paso por Xuño, parece que no ha sentado nada bien a nuestro alcalde y a sus compañeros de gobierno, si no, no se entiende a que viene colgar esa "coletilla" de: «hai que ver como quedan as modificacións cando se rematen», si ni tan siquiera estuvo en la reunión y tal y como digo hasta ahora, no conoce ni el proyecto.
Galicia tierra prodiga en refranes, dice que: "o falar non ten cancelas".
Esperamos que esas dos familias en lo posible puedan salir lo menos perjudicadas y que la obra genere sobre todo, seguridad, que es lo que se pide. La perdida de un terreno, una vivienda es recuperable, las vidas humanas, no.
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