:logo-lvg: | Barbanza
El sector de a pie al fin pudo coger los topes tras la toxina y la mortandad
Normalidad. Eso que parece tan simple pero que a veces resulta tan complicado conseguir es lo que busca desesperadamente el marisqueo noiés. Los productores, pese a no haber pasado ni un mes desde que volvieron al mar, ya acumulan tres intentos de empezar la campaña con normalidad. En la primera ocasión las cosas se torcieron porque, solo dos días después de iniciar su faena, la toxina se coló en su fiesta y les abocó al paro. En el segundo intento, hubo una sensación agridulce; al sector de a flote le fue bien pero a las mariscadoras a pie no, ya que encontraron berberecho muerto, lo que hizo que estuviesen de nuevo paradas unos días. Y ayer tocaba probar suerte por tercera vez: todos al mar de nuevo. Las cosas mejoraron algo. Pero no llegó a cumplirse al 100% eso de que a la tercera va la vencida.
Ayer, lo que ocurrió fue que el viento y la lluvia condicionaron sobremanera el trabajo. De hecho, un pequeño porcentaje del sector de a flote decidió amarrar. Mientras que las mujeres que faenan a pie no pudieron llegar tan adentro como hubiesen deseado. Aún así, al término de la jornada, las sensaciones, sino buenas, eran al menos aceptables. «Penso que a maioría da xente colleu os topes, o cal é un síntoma de que mal non foi», señaló. Y algo similar señalaba Dominica Fernández, la presidenta de la agrupación de a pie: «Os cupos de berberecho fóronse collendo, incluso se colleu tamén ameixa, pero a verdade é que o tempo estivo moi mal e era difícil traballar».
Por tanto, el tercer intento de iniciar la campaña puede darse casi por bueno. Habrá que ver si a partir de ahora la normalidad manda y finalmente los productores noieses, tanto los de a pie como a los de a flote, pueden seguir sumando jornadas de faena sin sobresaltos.
Reunión con la consellería
Mientras ellos toman los arenales, el patrón mayor sacar rédito a una visita que hará a la Consellería de Mar. La cofradía, a raíz de la debacle ocurrida con la toxina -hubo que destruir 67 toneladas de bivalvo, perdiéndose un total de 371.000 euros- pidió una reunión con el departamento que dirige Rosa Quintana. Y desde Santiago le enviaron un fax citándole para una fecha próxima. En ese encuentro, Santiago Cruz pedirá una compensación para el pósito por el retraso con el que el Intecmar detectó la marea roja.
Normalidad. Eso que parece tan simple pero que a veces resulta tan complicado conseguir es lo que busca desesperadamente el marisqueo noiés. Los productores, pese a no haber pasado ni un mes desde que volvieron al mar, ya acumulan tres intentos de empezar la campaña con normalidad. En la primera ocasión las cosas se torcieron porque, solo dos días después de iniciar su faena, la toxina se coló en su fiesta y les abocó al paro. En el segundo intento, hubo una sensación agridulce; al sector de a flote le fue bien pero a las mariscadoras a pie no, ya que encontraron berberecho muerto, lo que hizo que estuviesen de nuevo paradas unos días. Y ayer tocaba probar suerte por tercera vez: todos al mar de nuevo. Las cosas mejoraron algo. Pero no llegó a cumplirse al 100% eso de que a la tercera va la vencida.
Ayer, lo que ocurrió fue que el viento y la lluvia condicionaron sobremanera el trabajo. De hecho, un pequeño porcentaje del sector de a flote decidió amarrar. Mientras que las mujeres que faenan a pie no pudieron llegar tan adentro como hubiesen deseado. Aún así, al término de la jornada, las sensaciones, sino buenas, eran al menos aceptables. «Penso que a maioría da xente colleu os topes, o cal é un síntoma de que mal non foi», señaló. Y algo similar señalaba Dominica Fernández, la presidenta de la agrupación de a pie: «Os cupos de berberecho fóronse collendo, incluso se colleu tamén ameixa, pero a verdade é que o tempo estivo moi mal e era difícil traballar».
Por tanto, el tercer intento de iniciar la campaña puede darse casi por bueno. Habrá que ver si a partir de ahora la normalidad manda y finalmente los productores noieses, tanto los de a pie como a los de a flote, pueden seguir sumando jornadas de faena sin sobresaltos.
Reunión con la consellería
Mientras ellos toman los arenales, el patrón mayor sacar rédito a una visita que hará a la Consellería de Mar. La cofradía, a raíz de la debacle ocurrida con la toxina -hubo que destruir 67 toneladas de bivalvo, perdiéndose un total de 371.000 euros- pidió una reunión con el departamento que dirige Rosa Quintana. Y desde Santiago le enviaron un fax citándole para una fecha próxima. En ese encuentro, Santiago Cruz pedirá una compensación para el pósito por el retraso con el que el Intecmar detectó la marea roja.
0 comentarios:
Publicar un comentario