10 julio 2010

Doce días sin papá y mamá

:lvg: | 10/07/2010
Mil jóvenes de Galicia y España disfrutarán en diferentes períodos estivales de los campamentos Virxe de Loreto y Espiñeira en Porto do Son y Boiro, respectivamente.

Son muchos los motivos por los que cíclicamente y desde hace varias décadas los campamentos estivales de la Xunta copan cada una de las plazas que ofertan. Los motivos son incontables. Y un ejemplo lo ofrecía ayer tarde la playa sonense de Aguieira, en donde 120 jóvenes de Galicia, Cantabria, Álava y Aragón disfrutaban de las muchas actividades que posibilita la costa en la que se encuentra ubicado: kayak, surf, kitesurf y Body Board, además de iniciación a la escalada en un rocódromo. La hípica y el tiro con arco también forman parte del catálogo de ocio del que disfrutan en períodos de 12 días todos los jóvenes matriculados.

Coincidiendo con la visita que hizo el director xeral de Xuventude e Voluntariado, Ovidio Rodeiro, al centro, se hizo público que estas iniciativas son una forma de fomentar el empleo, ya que generan en Galicia 1.100 puestos de trabajo, siendo en el caso del centro Virxe de Loreto de 18 trabajadores directos, además de otros indirectos.

Forjando actores

Muy lejos de la vocación náutica se encuentran las actividades programadas en el campamento boirense de Espiñeira. Un recinto con capacidad durante julio y agosto para 570 jóvenes, de las que 430 plazas están comprometidas. La particularidad de este centro enmarcado dentro del programa Acción de verán, es la organización de actividades relacionadas con el teatro como dramatización, expresión corporal, desinhibición, obradoiros de formación y observación. Al margen del amplio abanico deportivos y formativo, lo que refrenda el éxito de estas iniciativas, es la vocación evasiva que significa y simboliza para los jóvenes estar doce días sin papá y mamá, entre otras muchas cosas.

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