:logo-lvg: | Barbanza
El día 22 de noviembre se celebrará en Santiago una manifestación de protesta
La asamblea que a última hora de la tarde del sábado reunió en la casa de cultura de Boiro a representantes de comunidades de montes de toda la comarca sirvió para evidenciar la preocupación que existe entre estas entidades por las deudas que les reclama la Administración autonómica. Y sirvió también para mostrar el propósito de los comuneros de luchar por la condonación de esas obligaciones hasta las últimas consecuencias, recurriendo si hace falta a la vía judicial.
De hecho, según lo que se habló en esa reunión, hay comunidades de montes que ya contactaron con asesores legales para saber cómo está el asunto y, al parecer, tienen las de ganar si optan por llevar su problema a los tribunales. Sin embargo, ese será su último recurso, y mientras tanto quieren agotar la baza de la presión social para lograr su objetivo. En esta línea, está convocada una manifestación el 22 de noviembre en Santiago, para la que se fletarán dos autobuses desde la comarca con el objetivo de movilizar al mayor número de personas posible.
«Débedas falsas»
Con la protesta se pretende lograr que la Xunta perdone a las entidades que gestionan superficies forestales comunales una deuda que ellas no reconocen como tal. Xosé Alfredo Pereira, presidente de la Organización Galega de Comunidades de Montes, que aglutina a unos doscientas colectivos, explicó con detalle, tras demandar a la consellería las cuentas de las que resultan esas «supostas» obligaciones, que «moitas desas débedas non teñen sustento, non se xustifican». Asimismo, denunció una vez más que las entidades que no paguen la cantidad que les reclama la Administración tendrán que dejar la gestión de sus montes en manos de empresas privadas, algo en lo que Pereira ve «unha intención política, non se trata resolver unha cuestión técnica de xestión».
Por su parte, los comuneros que asistieron a la asamblea del sábado manifestaron su preocupación y sus dudas sobre el proceso que se abrirá si no pagan lo que les reclaman. Por último, se hizo un llamamiento a la participación en la manifestación de noviembre: «O fundamental é ser conscientes do que se nos vén encima e mobilizarse».
La asamblea que a última hora de la tarde del sábado reunió en la casa de cultura de Boiro a representantes de comunidades de montes de toda la comarca sirvió para evidenciar la preocupación que existe entre estas entidades por las deudas que les reclama la Administración autonómica. Y sirvió también para mostrar el propósito de los comuneros de luchar por la condonación de esas obligaciones hasta las últimas consecuencias, recurriendo si hace falta a la vía judicial.
De hecho, según lo que se habló en esa reunión, hay comunidades de montes que ya contactaron con asesores legales para saber cómo está el asunto y, al parecer, tienen las de ganar si optan por llevar su problema a los tribunales. Sin embargo, ese será su último recurso, y mientras tanto quieren agotar la baza de la presión social para lograr su objetivo. En esta línea, está convocada una manifestación el 22 de noviembre en Santiago, para la que se fletarán dos autobuses desde la comarca con el objetivo de movilizar al mayor número de personas posible.
«Débedas falsas»
Con la protesta se pretende lograr que la Xunta perdone a las entidades que gestionan superficies forestales comunales una deuda que ellas no reconocen como tal. Xosé Alfredo Pereira, presidente de la Organización Galega de Comunidades de Montes, que aglutina a unos doscientas colectivos, explicó con detalle, tras demandar a la consellería las cuentas de las que resultan esas «supostas» obligaciones, que «moitas desas débedas non teñen sustento, non se xustifican». Asimismo, denunció una vez más que las entidades que no paguen la cantidad que les reclama la Administración tendrán que dejar la gestión de sus montes en manos de empresas privadas, algo en lo que Pereira ve «unha intención política, non se trata resolver unha cuestión técnica de xestión».
Por su parte, los comuneros que asistieron a la asamblea del sábado manifestaron su preocupación y sus dudas sobre el proceso que se abrirá si no pagan lo que les reclaman. Por último, se hizo un llamamiento a la participación en la manifestación de noviembre: «O fundamental é ser conscientes do que se nos vén encima e mobilizarse».
0 comentarios:
Publicar un comentario