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El número de desempleados sigue por encima de las 10.000 personas
En Barbanza hace tiempo que se instaló la idea de que la comarca es una especie de oasis con respecto a Galicia en términos de desempleo. Es decir que, aunque las cosas no van bien, la situación aquí sí es un poco mejor que en el conjunto gallego. ¿Tiene base esa afirmación? Con las estadísticas en la mano, tiene cierta razón de ser. El paro, aunque desafortunadamente sigue desbocado y en noviembre volvió a incrementarse, sube menos que la media gallega -en Galicia, en el último mes subió un 0,98% y en el área barbanzana un 0,92-. Pero, ojo. Las cosas ya iban mejor de lo que van. Y la situación actual es peor que la que se vivía a finales del ejercicio 2012.
Desde que la crisis hizo trizas la economía, la comarca, gracias sobre todo al motor económico que supone la industria conservera, arrojó titulares muy positivos. Hubo meses en los que el área barbanzana era la única de Galicia en la que bajaba el paro. Pero ha llovido desde entones. Ahora, Barbanza acumula ya tres meses de subidas consecutivas del desempleo. Y si se comparan los datos del mes pasado, cuando la cifra de parados se situó en 10.292 personas, con los de noviembre del 2012, el resultado es que ahora hay 180 vecinos más intentando encontrar un hueco en el mercado laboral.
El último dato aportado por Traballo indica, además, que la comarca sigue por encima de la barrera de los 10.000 desempleados, de la que se lograra bajar a mediados de este año después de un 2012 complicado. Es decir, que las cosas siguen yendo un poco mejor que en el conjunto de Galicia, pero no tanto como en el pasado reciente.
Las causas
Los sindicatos, que valoraban ayer de forma muy negativa estos datos, intentaban buscarles explicación. Desde la CIG y UGT recordaban cuestiones como que el sector servicios es el que acumula más desempleados y que está muy ligado a la temporalidad y a la estacionalidad. «Ás veces, coas contratacións do verán cremos que as cousas van mellor, pero chega o outono e vese a realidade», señalaba Xan García. Por su parte, el responsable comarcal de Comisiones Obreras, Xosé Lamela, también abordaba otra cuestión. Señalaba que, aunque este mes el paro no subió en la industria, la crisis que se arrastra debido a la toxina se hace notar y hay unos niveles de empleo en ese ramo «anormalmente reducidos porque se suspenderon contratos».
En Barbanza hace tiempo que se instaló la idea de que la comarca es una especie de oasis con respecto a Galicia en términos de desempleo. Es decir que, aunque las cosas no van bien, la situación aquí sí es un poco mejor que en el conjunto gallego. ¿Tiene base esa afirmación? Con las estadísticas en la mano, tiene cierta razón de ser. El paro, aunque desafortunadamente sigue desbocado y en noviembre volvió a incrementarse, sube menos que la media gallega -en Galicia, en el último mes subió un 0,98% y en el área barbanzana un 0,92-. Pero, ojo. Las cosas ya iban mejor de lo que van. Y la situación actual es peor que la que se vivía a finales del ejercicio 2012.
Desde que la crisis hizo trizas la economía, la comarca, gracias sobre todo al motor económico que supone la industria conservera, arrojó titulares muy positivos. Hubo meses en los que el área barbanzana era la única de Galicia en la que bajaba el paro. Pero ha llovido desde entones. Ahora, Barbanza acumula ya tres meses de subidas consecutivas del desempleo. Y si se comparan los datos del mes pasado, cuando la cifra de parados se situó en 10.292 personas, con los de noviembre del 2012, el resultado es que ahora hay 180 vecinos más intentando encontrar un hueco en el mercado laboral.
El último dato aportado por Traballo indica, además, que la comarca sigue por encima de la barrera de los 10.000 desempleados, de la que se lograra bajar a mediados de este año después de un 2012 complicado. Es decir, que las cosas siguen yendo un poco mejor que en el conjunto de Galicia, pero no tanto como en el pasado reciente.
Las causas
Los sindicatos, que valoraban ayer de forma muy negativa estos datos, intentaban buscarles explicación. Desde la CIG y UGT recordaban cuestiones como que el sector servicios es el que acumula más desempleados y que está muy ligado a la temporalidad y a la estacionalidad. «Ás veces, coas contratacións do verán cremos que as cousas van mellor, pero chega o outono e vese a realidade», señalaba Xan García. Por su parte, el responsable comarcal de Comisiones Obreras, Xosé Lamela, también abordaba otra cuestión. Señalaba que, aunque este mes el paro no subió en la industria, la crisis que se arrastra debido a la toxina se hace notar y hay unos niveles de empleo en ese ramo «anormalmente reducidos porque se suspenderon contratos».
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