:ecg: | 11/12/2010
Considera que no está acreditado que el uso del vial sea de carácter público
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) desestimó el recurso interpuesto por un vecino de Portosín contra una sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo, concretamente del pasado día 9 de febrero de 2009, que anuló dos acuerdos plenarios del Concello de Porto do Son para la recuperación de oficio del camino público existente a la altura del número 28 del lugar de A Recholiña-Freixedo, en Goiáns-Portosín.
En la sentencia, el TSXG rechaza la apelación de Antonio Fernández Cantariño que pretendía revocar el fallo que, a instancias de Manuel Ces Álvarez, anuló los acuerdos plenarios sonenses de 11 de noviembre de 2005 y 28 de julio de 2006 que pretendían la recuperación del camino como público. El tribunal tiene en cuenta, como de mayor objetividad, la versión ofrecida por el arquitecto municipal frente a la de un ingeniero técnico agrícola,
El primero de ellos "niega la existencia de vestigios que diferencien la naturaleza pública o privada del camino que no está reflejado en la perimetría, ni está acreditado que el uso sea público, pues podría ser pirvado o tratarse de una serventía".
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) desestimó el recurso interpuesto por un vecino de Portosín contra una sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo, concretamente del pasado día 9 de febrero de 2009, que anuló dos acuerdos plenarios del Concello de Porto do Son para la recuperación de oficio del camino público existente a la altura del número 28 del lugar de A Recholiña-Freixedo, en Goiáns-Portosín.
En la sentencia, el TSXG rechaza la apelación de Antonio Fernández Cantariño que pretendía revocar el fallo que, a instancias de Manuel Ces Álvarez, anuló los acuerdos plenarios sonenses de 11 de noviembre de 2005 y 28 de julio de 2006 que pretendían la recuperación del camino como público. El tribunal tiene en cuenta, como de mayor objetividad, la versión ofrecida por el arquitecto municipal frente a la de un ingeniero técnico agrícola,
El primero de ellos "niega la existencia de vestigios que diferencien la naturaleza pública o privada del camino que no está reflejado en la perimetría, ni está acreditado que el uso sea público, pues podría ser pirvado o tratarse de una serventía".
¿Quién le paga ahora a este vecino por defender lo que era suyo?
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