:lvg: | 24/01/2010
Dicen ahora los alcaldes que no tienen ni para pipas y ello se refleja en los edificios acabados y cerrados a cal y canto por falta de fondos para el mobiliario o el personal. Deberían recordar que el bum del ladrillo no siempre llenó las arcas de los concellos. ¿Se derrochó demasiado durante esa época gloriosa o se supo administrar mejor el dinero en el pasado?.
Porto do Son nadó en la abundancia gracias a la "desfeita urbanista" que denunció el BNG, aunque ahora renieguen de sus denuncias. Hoy es un hecho demostrable que a la vista esta.
La pregunta es, ¿que infraestructuras se construyeron no solo en la capital del municipio, si no en el resto parroquias en los últimos años?
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